Ciudad del Vaticano. AFP. El papa Francisco anunció este martes que los sacerdotes de todo el mundo podrán conceder durante el año del Jubileo el perdón a las mujeres que hayan abortado y a quienes lo hayan facilitado, y pidió una “amnistía” para los detenidos.
El anuncio lo hizo por medio de una carta al presidente del Consejo Pontificio para la Nueva Evangelización, en la que autoriza a todos los sacerdotes durante el año del Jubileo, que se inicia en diciembre, a absolver a las mujeres que estén arrepentidas de haber abortado.
“Conozco bien los condicionamientos que condujeron a (las mujeres) a esa decisión. Sé que es un drama existencial y moral. He encontrado a muchas mujeres que llevaban en su corazón una cicatriz por esa elección sufrida y dolorosa”, escribió el papa oriundo de América Latina, donde el aborto es ilegal en muchos países.
“Algunos viven el drama del aborto con una conciencia superficial, casi sin darse cuenta del gravísimo mal que comporta un acto de ese tipo. Muchos otros, en cambio, incluso viviendo ese momento como una derrota, consideran no tener otro camino por donde ir”, añadió.
El Papa considera el aborto un pecado y un drama “injusto” y, a la vez , “una derrota”, escribió.
“El perdón de Dios no se puede negar a todo el que se haya arrepentido”, indicó el Pontífice al anunciar la medida excepcional.
“He decidido conceder a todos los sacerdotes para el año jubilar (del 8 de diciembre del 2015 al 1.° setiembre del 2016), no obstante cualquier cuestión contraria, la facultad de absolver del pecado del aborto a quienes lo han practicado y, arrepentidos de corazón, piden por ello perdón”, escribió.
“Los sacerdotes se deben preparar para esta gran tarea, sabiendo conjugar palabras de genuina acogida con una reflexión que ayude a comprender el pecado cometido, e indicar un itinerario de conversión”, precisó.
Según las normas de la Iglesia, los obispos son los encargados de conceder el perdón.
Gravedad. El Derecho Canónico considera el aborto como una falta grave que implica la excomunión automática, al menos que la persona se vea forzada a hacerlo.
Conceder el perdón por el aborto es un asunto delicado para la Iglesia, ya que en el pasado, bajo el papado de Benedicto XVI, la posición sobre ese tema era severa y el Papa llegó a apoyar en el 2009 la excomunión de una mujer y de los médicos que ayudaron en el aborto de una niña de 9 años violada por su padrastro, considerando que la violación era “menos grave que el aborto”.
Las reacciones de los defensores de los derechos de las mujeres en América Latina a este anuncio de Francisco fueron de satisfacción. En Argentina, Marta Alanis, fundadora de la agrupación Católicas por el Derecho a Decidir, dijo que esta “flexibilización del Papa no reconoce que el aborto es un dilema ético” para las mujeres, aunque estima que “hay que verle el lado positivo”.
“Si bien el Papa nunca va a impulsar el derecho al aborto, sí flexibiliza una posición tan dogmática, el Parlamento argentino debería dar el debate”, exhortó.