Lugansk. AFP. Estados Unidos afirmó ayer tener “pruebas” de que Moscú continúa permitiendo la entrada de combatientes y armas al este de Ucrania, que enfrenta una insurrección prorrusa .
“Hay pruebas de que Rusia sigue permitiendo la libre circulación de armas, fondos y combatientes a través de su frontera” con Ucrania, declaró el secretario del Tesoro estadounidense, Jacob Lew, en un discurso en Washington.
Moscú rechaza las acusaciones de que está implicado en la desestabilización de Ucrania y exige que Kiev ponga fin a su “operación castigo” en el este del país, que ha dejado cerca de 200 muertos (entre soldados, rebeldes y civiles) desde que fue lanzada el 13 de abril.
Asimismo, Rusia pidió este lunes la creación de “corredores humanitarios” en el marco de una resolución del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas.
“Las intenciones del presidente ruso (Vladimir Putin) no son claras”, dijo Lew, quien estimó que las sanciones impuestas a personas allegadas a Putin tras la anexión de Crimea habían debilitado la economía rusa y “desalentado” una ofensiva militar de Moscú en Ucrania.
“La economía rusa está cada vez más aislada del sistema financiero internacional”, aseguró el secretario del Tesoro, quien agregó que los “daños colaterales” para Estados Unidos , Europa y la economía mundial han sido “limitados”.
Lew dijo también que las sanciones internacionales contra Irán para que abandone su programa de desarrollo de armas nucleares, han producido resultados positivos.
“Irán participa en negociaciones por primera vez en una década y se ha detenido su avance en el programa nuclear”, manifestó.
Negociación. Entre tanto, la firma semiestatal rusa Gazprom anunció ayer que aplazó al 9 de junio el paso al sistema de prepago para sus entregas de gas a Ucrania , lo que implica retrasar una semana el corte de suministro al país, que podría afectar a los países europeos.
El presidente ejecutivo de Gazprom, Alexéi Miller, confirmó en este sentido haber recibido un primer ingreso de $786 millones de ( de la deuda total) que Kiev mantiene con el gigante ruso.
El primer ministro ucraniano, Arseni Yatseniuk, prometió que Ucrania abonaría antes de diez días su deuda gasística con Rusia, si los dos países llegaban el lunes a un acuerdo sobre el precio del contrato durante el encuentro entre representantes de Kiev y Moscú en Bruselas con el comisario europeo de Energía, Günther Oettinger.
Tras la destitución del presidente prorruso ucraniano, Víktor Yanukóvich, la cual se llevó a cabo en febrero, Gazprom decidió elevar el precio del hidrocarburo suministrado a Kiev, una factura que las autoridades ucranianas proocidentales rechazan pagar.