Viena. AFP. El Parlamento austriaco aprobó este miércoles un controvertido proyecto de ley que permite decretar el “estado de emergencia” migratorio para limitar el derecho de asilo, mientras la extrema derecha gana adeptos en el país.
El texto, elaborado desde hace meses pese a las protestas de organizaciones no gubernamentales y de una parte de la oposición, es uno de los más restrictivos de Europa y permitirá bloquear a migrantes en las fronteras, sin siquiera darles la posibilidad de solicitar asilo en determinadas circunstancias.
Esta nueva ley, adoptada por 98 votos contra 67, limita en particular a tres años la duración de la estadía después de una demanda inicial aprobada y prevé el mencionado “estado de emergencia” migratorio.
“No podemos acoger toda la miseria del mundo”, explicó el nuevo ministro de Interior, Wolfgang Sobotka, quien aseguró que “el Gobierno no actuaba por placer, sino porque otras naciones no hacen adecuadamente su trabajo en materia de control migratorio”.
Además, la nueva norma restringe el reagrupamiento familiar para los beneficiarios de la protección subsidiaria, afganos en su mayoría.
Sin embargo, lo que ha generado más polémica es la posibilidad de proclamar el “estado de emergencia” migratoria si los servicios del Estado consideran estar “superados”.
Bajo este régimen, todos los demandantes de asilo, incluidos sirios e iraquíes, serán contenidos en las fronteras, a menos que puedan probar que están siendo perseguidos en el país del que proceden directamente; por ejemplo, Italia.
Punto clave. Por Austria, situada en el cruce de dos principales rutas migratorias en Europa –la de los Balcanes y la que llega desde Italia–, transitaron cientos de miles de refugiados el año pasado.
El país acogió a 90.000 migrantes en el año anterior; es decir, más del 1% de su población, solo superado por Suecia dentro de la Unión Europea (UE).
Para el 2016, Viena se fijó un techo de 37.500 solicitantes de asilo suplementarios, después de asegurar que sus capacidades de integración están alcanzando el límite.
Desde principios de este año, el país ha registrado alrededor de 18.000 solicitudes de asilo .
Mientras tanto, la coalición gubernamental del canciller socialdemócrata, Werner Faymann, y del vicecanciller conservador, Reinhold Mitterlehner, ha endurecido su política migratoria, mientras la extrema derecha del Partido de la Libertad de Austria (FPÖ) se ha hecho fuerte en la república alpina.
El candidato ultraderechista Norbert Hofer recabó el 35% de los votos en la primera vuelta de las elecciones del domingo.