Kuala Lumpur. AP. Malasia informó ayer de que redujo el área de búsqueda del avión desaparecido en el sur del océano Índico, mientras Australia dijo que la mejoría de las condiciones climáticas permitirá la reanudación de la búsqueda de los restos del aparato.
La información la dio el ministro de Defensa malasio, Hishammuddin Huseín.
“No estamos buscando una aguja en un pajar, sino que todavía estamos tratando de determinar dónde está el pajar”, dijo el subjefe de la defensa australiana y mariscal del aire, Mark Binskin.
Se han precisado dos corredores con base en datos de satélite para la búsqueda. Hishammuddin dijo que las operaciones se levantaron en el corredor norte, que iba de Malasia al Asia central, y en el norte del corredor sur que va de Malasia hacia la Antártida.
Todavía queda una vasta superficie de 1,6 millones de kilómetros cuadrados por revisar.
En declaraciones al Parlamento, el primer ministro, Najib Razak, advirtió de que la búsqueda podría llevar mucho tiempo.
El lunes, Najib anunció que el Boeing 777 se precipitó al mar sin que hubiese sobrevivientes. Eso es todo lo que los investigadores y el Gobierno de Malasia han podido informar con certeza sobre lo que le ocurrió al vuelo MH370 de Malaysia Airlines desde que desapareció el 8 de marzo, después de despegar de Kuala Lumpur, rumbo a Pekín.
Incógnitas. Persisten muchas incógnitas acerca de por qué el avión se alejó tanto de su ruta. Los expertos que estudian los datos de radar y satélite creen que el aparato volvió atrás, atravesó Malasia hacia el oeste y siguió por el océano Índico.
Los investigadores estudian varias posibilidades, incluso fallas mecánicas o eléctricas, secuestro, sabotaje, terrorismo o la salud mental de los pilotos.
“No sabemos por qué. No sabemos cómo. No sabemos de qué modo ocurrió esta terrible tragedia”, expresó el director general de la aerolínea, Ahmad Jauhari Yahya.
Mientras, en Pekín, un centenar de familiares y allegados marcharon hacia la Embajada de Malasia, arrojaron botellas de plástico y gritaron “¡Mentirosos! ¡Mentirosos!”.
El vicecanciller chino, Zhang Yesui, viajó a Kuala Lumpur para informarse sobre la situación, en tanto otro alto funcionario de la Cancillería, Xie Xie Hangsheng, dijo al embajador de Malasia que China deseaba saber exactamente qué motivó a Najib a anunciar que el avión se había perdido.
La conclusión se basó en un análisis exhaustivo de las breves señales que el avión envió cada hora a un satélite, aun después de que los sistemas de comunicación del aparato dejaron de emitir.