Washington
El presidente estadounidense, Barack Obama, calificó este viernes de "gran victoria de la comunidad internacional", el acuerdo para una resolución de la ONU sobre la destrucción del arsenal químico del régimen sirio.
Obama realizó esas declaraciones ante periodistas frente al Salón Oval, donde venía de recibir al primer ministro indio Manmohan Singh, horas antes de una reunión del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas consagrada a la crisis siria.
"Esto es algo que hemos buscado desde hace mucho", declaró Obama a los periodistas al describir el plan como una "gran victoria de la comunidad internacional.
"De forma realista es dudoso que hubiéramos llegado hasta este punto sin la amenaza creíble de una acción (armada) estadounidense como consecuencia de la horrible tragedia que ocurrió el 21 de agosto", declaró Obama en relación al ataque con armas químicas en un suburbio de Damasco.
Obama también reconoció que su preocupación sobre la sinceridad del régimen de Bashar al-Asad persiste, aunque la resolución de desarme es "vinculante" y "verificable" con amenazas de consecuencias si Siria no se adhiere a las condiciones.
"De forma correcta la gente está preocupada sobre si Siria cumplirá sus compromisos", dijo.
Obama afirmó que tenía esperanzas de que el acuerdo se lograse pero añadió que entiende que haya preocupaciones sobre cómo llevarlo a cabo.
"Creo que hay preocupaciones legítimas sobre cómo técnicamente vamos a lograr (eliminar) esas armas químicas mientras que todavía continúa la lucha", afirmó.
Sin embargo, calficó el plan como un significativo paso hacia delante.
Por su parte, el papa Francisco se pronunció este viernes a favor de la labor de la Organización para la Prohibición de las Armas Químicas (OPAQ), que revisa la información recibida de Siria sobre su programa de armamento químico, tras recibir en audiencia privada en el Vaticano al director de la entidad.
Al término del encuentro con el director de OPAQ, el diplomático turco Ahmet Uzümcü, el Vaticano no divulgó algún comunicado y se limitó a comunicar que apoya los esfuerzos para erradicar las armas químicas en el mundo, y en particular en el Medio Oriente.
Según un comunicado de la entidad internacional, divulgado en Bruxelas, el director general explicó al Papa la difícil misión que le fue confiada en Siria "para verificar la eliminación de las armas químicas y de sus capacidades".
"El Santo Padre subrayó que la comunidad internacional debe mantenerse unida en el rechazo de las armas químicas", sostiene la nota.
OPAQ ratificará este viernes una hoja de ruta para la destrucción del arsenal químico sirio, cuya inspección debería comenzar como muy tarde el martes y autorizar incluso la visita de lugares no incluidos en el listado de Damasco.
La hoja de ruta debe adoptarse antes de que la ONU vote un proyecto de resolución cerrado en la noche del jueves al viernes entre rusos y estadounidenses, que prevé la destrucción del arsenal de Bashar al-Asad y sanciones contra Siria si incumple el plan de desarme.