EscucharWashington (AP). La cena de Estado ofrecida por el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, a su homólogo de México, Felipe Calderón, y a su esposa, Margarita Zavala, se inició con un brindis para celebrar la amistad entre las dos naciones.
Al alabar las contribuciones de México al mundo, Obama destacó una comida muy buena, como el alimento de los dioses: chocolate.
Calderón, por parte, felicitó a los estadounidenses por tener un presidente como Barack Obama y, a Obama, por tener a una esposa y primera dama como Michelle Obama.
Mientras unos 200 invitados llegaban a la cena por una puerta de la Casa Blanca, los Obama le dieron la bienvenida a la pareja presidencial de México en el Pórtico Norte.
Michelle Obama lució un resplandeciente vestido largo de medio hombro, color azul eléctrico, con un cinturón y zarcillos plateados. Zavala llevó un vestido ciruela, con un bordado tipo Azteca alrededor de un cuello rectangular.
La Casa Blanca prometió que la seguridad sería reforzada en esta cena y así fue. La primera cena de Estado de los Obama fue ensombrecida por la presencia de una pareja sin invitación, quienes lograron evadir la seguridad y hasta le dieron un apretón de manos al presidente Obama.
De hecho, se le impidió el paso a al menos una invitada por no tener la identificación adecuada. Kathryne Mudge, esposa del subsecretario de Estado estadounidense para el Hemisferio Occidental, Arturo Valenzuela, dijo que su esposo estaba encargado de llevar la identificación.
Tratamos de ser extra cuidadosos, pero mi esposo es el profesor despistado, dijo Mudge.
Sin embargo, su noche no se arruinó pues una hora después regresaron y entraron a la cena en el East Room.
Entre los invitados se encontraban Whoopi Goldberg, Eva Longoria Parker y George López.
Longoria Parker dijo que es importante que se haga esta cena en estos momentos con líderes mexicanos, dada la tensión en torno al tema migratorio en Estados Unidos.
No puedes tener a unos estados con sus propias leyes punitivas, insistió, al referirse a la nueva ley de Arizona considerada como anti-inmigrante por grupos hispanos y activistas.
Otros invitados llegaron luego para el postre y el acto artístico posterior en una gran carpa blanca en el jardín sur de la Casa Blanca.
Hoy celebramos los lazos entre Estados Unidos y México, incluyendo la música que nos une y nos emociona, dijo Obama una vez la fiesta se mudó al exterior.
Al dúo de cantantes mexicanos Rodrigo y Gabriela y Beyonce amenizaron la velada.
El chef Bayless fue seleccionado para la segunda cena de Estado en la Casa Blanca.
El menú abrió con una ensalada de jícama con naranja, uva y piña, seguida por un cebiche de pez sol hawaiano con vegetales. El plato central fue la selecta carne de res tipo wagyu de Oregón,servido en la salsa llamada mole negro de Oaxaca, que según Bayless lleva más de 20 ingredientes y se prepara en varios días. Este plato fue acompañado de humitas de judías verdes y negras.
Una tartaleta de cajeta (dulce de leche), hecha también con chocolate y malvaviscos domésticos asados fue el postre, junto con hojuelas de galletas de trigo hechas con miel de la colmena de la Casa Blanca, así como helado de queso de cabra.
Los dos presidentes y sus esposas se sentaron en una mesa rectangular, mientras los invitados ocuparon mesas rectangulares y redondas.
Unos 100 invitados participaron en la fiesta posterior en una carpa, con una decoración que simulaba el vuelo de mariposas Monarca.
La Casa Blanca dijo que la decoración fue escogida para honrar el estado natal del presidente Calderón, Michoacán, adonde llegan las Monarca cada primavera desde Canadá.
El presidente Calderón comenzó el miércoles una visita de Estados de dos días. En su primer encuentro en Washington, Obama y Calderón coincidieron en cuestionar la ley migratoria de Arizona.
