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Pekín. AFP y EFE. Las autoridades chinas notificaron ayer la detención, bajo orden de la fiscalía, del disidente Liu Xiaobo, una figura emblemática del movimiento democrático, y aseguraron que confesó haber encabezado actividades “subversivas” para “derrocar al sistema socialista”.
Liu, escritor y exprofesor, de 53 años, es uno de los 302 firmantes de la Carta 2008 que pedía reformas democráticas; fue detenido el 8 de diciembre junto a otros disidentes.
Llevaba más de seis meses bajo custodia policial pese a no estar acusado de ningún delito, algo que las fuerzas de seguridad basaban en “razones de investigación”.
“La policía china no cumplió la ley, limitando su libertad de movimientos. Ahora sí se le ha detenido oficialmente, con aprobación de la fiscalía” , explicó su abogado Mo Shaoping, conocido defensor de activistas proderechos humanos.
La policía de Pekín, citada por los medios oficiales, indicó que Liu está oficialmente detenido desde el martes por “actividades de agitación, como la propagación de rumores y la difamación del gobierno, con el propósito de subvertir y derrocar al sistema socialista”.
Su esposa, Liu Xia, recibió ayer la notificación oficial, indicó el abogado del disidente, Mo Shaoping.
Amnistía Internacional denunció de inmediato la utilización de “acusaciones vinculadas a la seguridad del Estado para castigar a militantes que se limitaban a expresar sus puntos de vista”.
Liu fue detenido en el marco de un refuerzo del control de los medios disidentes y de Internet, en vísperas de una serie de aniversarios sensibles, como el de la violenta represión de la plaza Tiananmen en junio de 1989.
El abogado explicó que la notificación policial no constituye aún una inculpación oficial, que corre a cargo del procurador general.
Los cargos de subversión en China son sujetos de 15 años de cárcel.
Mo Shaoping indicó que las autoridades decidieron prohibirle defender a Liu durante el juicio, según le comunicaron a su esposa.
