"La cirugía duró casi tres horas, concluyó con éxito y en ella le fueron retiradas 14 agujas que estaban clavadas en el intestino, la vejiga y el hígado", según una funcionaria del Hospital Ana Nery de Salvador de Bahia (nordeste) donde se realizó la intervención.
"Ahora resta una nueva operación que recién se realizará la semana próxima", acotó.
Esa cirugía es considerada de mayor riesgo porque se busca retirar dos agujas cerca de la columna, aunque dependerá de cómo evolucione el menor.
Las demás agujas no serán extraídas por cuanto no acarrean peligro directo.
El menor fue sometido a una primera operación el viernes, en la que le fueron retiradas cuatro agujas en áreas riesgosas: dos del pulmón izquierdo y otras dos cerca del corazón.
Las agujas fueron introducidas en el tórax, abdomen, cuello y piernas del niño, en aparentes rituales de magia negra.
El padrastro, Roberto Carlos Magalhaes, su amante, y otra mujer fueron detenidos la semana pasada, acusados de haber introducido esas piezas.
Magalhaes declaró a la policía de la localidad que se estaba vengando de su esposa, ya que discutían mucho.
Esta semana confesó a medios brasileños que "la intención era matar al niño".
La policía brasileña investiga otro caso de un niño a quien también le fueron encontradas agujas en el cuerpo, en el estado de Maranhao (nordeste), y que podría tratarse también de un caso de magia negra.
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