Managua
Un grupo religioso de centroamericanos asentado en un campamento en Venecia, a 205 kilómetros de Managua, se resiste a recibir ayuda y atención médica por parte de las autoridades del país, informó el Gobierno de Nicaragua.
La coordinadora del Consejo de Comunicación y Ciudadanía, Rosario Murillo, expuso que se encontraron a varios niños, procedentes de Jinotega (norte) , sin presencia de padres.
"Es imposible saber si estos niños han sido vacunados, por lo cual a nosotros nos preocupa la posibilidad de una epidemia. Había varios niños con varicela. No van a la escuela, se niegan a que los niños vayan a la escuela (...). Es una situación delicada", agregó Murillo.
Según explicó, las personas de este grupo religioso presentan problemas odontológicos, respiratorios, en la piel, signos de desnutrición y señales de parásitos.
"Estamos persuadiéndolos para garantizar todos los derechos de la niñez principalmente, y que comprendan que respetamos su libertad de culto ya que vivimos en un país donde respetamos el culto de cada quien", afirmó Murillo.
El grupo religioso, que se autodenomina "El Cuerpo Místico de Jesucristo" , está compuesto por unas 600 personas, de ellos 330 niños, quienes vendieron sus propiedades en El Salvador, Guatemala, Honduras y Nicaragua para alcanzar "la salvación", convocados por líderes de su creencia, según un informe del Ministerio de la Familia, Adolescencia y Niñez (Mifan) .
El Gobierno está preocupado ante la posibilidad de que se presente una epidemia en el lugar.
Mujeres subordinadas. Las mujeres que habitan en el campamento tienen "una subordinación total" hacia los hombres, informó la Comisaría de la Mujer.
"Aquí hay un subordinación total de las mujeres hacia la decisión de los maridos, los esposos, sus compañeros", informó la jefa de la Comisaría de la Mujer, Erlinda Castillo, a través de medios del Gobierno.
La subordinación de las mujeres se extiende hacia las palabras de sus pastores y ministros religiosos, resaltó Castillo.
El grupo de religiosos es investigado por las autoridades de Nicaragua por temor a que se estén violando los derechos humanos de sus integrantes.