Choques entre el ministro de Economía, Industria y Comercio (MEIC), Welmer Ramos, y los comisionados del grupo, llevaron a fuertes cambios en el seno de la Comisión para Promover la Competencia (Coprocom) y en la unidad técnica de apoyo.
Dos directores propietarios de la Coprocom y uno suplente renunciaron al cargo, en medio de una polémica por la forma como debe abordar los casos por denuncias de monopolios, prácticas monopolísticas y otros aspectos que van en contra de la transparencia del mercado.
Coprocom es un órgano autónomo adscrito al MEIC; este último aporta los funcionarios de la unidad técnica de apoyo. Tiene cinco comisionados propietarios y cinco suplentes.
El grupo, por ejemplo, ha recibido denuncias de supuestas prácticas monopolísticas en el comercio minorista y con productos farmacéuticos.
Dicha Comisión ha tenido tres cambios de director entre julio del año pasado y hoy, mientras la anterior directora llevaba seis años en el cargo pues asumió en el 2008 y fue separada en julio del 2014.
Además, seis de los 12 funcionarios de la unidad técnica de apoyo pasaron a responder directamente al viceministro del MEIC, Carlos Mora, quien dirige temporalmente la Comisión. Solo seis siguen respondiendo a los comisionados de la Coprocom, según las denuncias.
La principal crítica de quienes renunciaron es que una reestructuración impulsada por Ramos limitaría la autonomía de ese órgano.
Roces. David Solano Ortiz, quien era presidente de la Coprocom, fue uno de los que renunció, porque –dijo– existen diferencias conceptuales sustanciales respecto a los actuales alcances legales del despacho del ministro y de la Comisión, y la visión que cada uno tiene de lo que debe ser o hacer una autoridad de competencia.
Solano detalló que eso se refleja en decisiones tomadas por Ramos, quien puso en marcha una reestructuración de la unidad técnica de apoyo.
Los cuestionamientos se incluyeron en la carta de renuncia conjunta de Solano, Miguel Cantillo y Guiselle Chaves.
Según Solano, Ramos pretende incidir más en temas de divulgación y dar origen a investigaciones por prácticas anticompetitivas. “Está claro su deseo de controlar la divulgación de competencia y de que se le habilite a dar inicio a investigaciones en mercados o contra empresas específicas”, señaló.
El ministro Ramos aseguró que la Coprocom era un desorden y su intención es fortalecerla y darle estructura.
Las cámaras de Comercio de Costa Rica (CCCR) y Costarricense de la Industria Alimentaria manifestaron su preocupación y dijeron que esa Comisión debe ser independiente.
Alonso Elizondo, director ejecutivo de la CCCR, recordó que incluso amparada en esa independencia, la Comisión ha dado resoluciones contrarias a políticas del MEIC.