La agencia calificadora Fitch Ratings pasó de “estable” a “negativa” las perspectivas de las valoraciones internacionales de largo plazo de cuatro bancos costarricenses y de una subsidiaria panameña.
Esto, luego de la revisión de la perspectiva de la calificación soberana (del Estado) de Costa Rica, la cual registró el mismo cambio la semana pasada.
Los entidades son BAC San José, Banco Nacional (BN), Banco de Costa Rica (BCR), Banco Popular y la subsidiaria Bicsa (del BCR y BN).
“Estas acciones de calificación son consecuencia de la revisión reciente de la perspectiva de la calificación soberana de Costa Rica”, explicó la agencia en un comunicado.
El gerente del BAC San José, Gerardo Corrales, dijo no esperar un impacto negativo, pues la calificadora les mantuvo el grado de inversión, el cual permite que compañías de seguros y grandes fondos de pensiones inviertan en sus valores.
“Lo importante para nosotros es que se mantuvo el grado de inversión y que la argumentación es que, el haber puesto al país en una perspectiva negativa, afecta “como sombrilla” a las entidades que operan en Costa Rica”, comentó Corrales.
Leonardo Acuña, subgerente de Finanzas del BCR, resaltó que la decisión “no tiene efecto en la capacidad de captar recursos en el exterior, pero sí puede tener un impacto en el costo de captación, que podría aumentar ligeramente”.
Razones. Fitch detalló que las calificaciones de Banco Nacional y Banco de Costa Rica están alineadas a la calificación soberana (del país), debido a que estas instituciones son 100% propiedad estatal y a que poseen garantía soberana explícita.
Las calificaciones de Bicsa, por su parte, corresponden con las de su accionista mayoritario, el BCR.
Por otro lado, la revisión de las perspectivas del Banco Popular y BAC San José refleja el alto nivel de influencia del soberano sobre el sector financiero y el entorno operativo en general, señaló la calificadora.