Escuchar
Marvin Gómez y Victoria Fernández lograron, a bordo de un Hyundai Accent –auto correspondiente a la categoría N2–, adjudicarse la doble corona del Campeonato Nacional de Rali de velocidad.
Este culminó el sábado a altas horas de la noche, tras una larga jornada que comprendió diez etapas (cerca de 18 kilómetros en total), a través de las localidades de Poasito y Poás, en Alajuela, y Vara Blanca, en Heredia.
La tripulación integrada por Gómez y Fernández alcanzó la victoria en la clase N2 (hasta 1.600 centímetros cúbicos), así como en la Absoluta, donde también se incluyen los vehículos de N3 (los cuales son más potentes ya que son de 1.601 hasta 2000 c. c.), por lo que su triunfo tiene aún mayor mérito.
La fecha corrida el sábado fue la sexta de un certamen que comenzó el pasado mes de mayo.
En la clasificación general del Campeonato, en la categoría Absoluta, Gómez y Fernández hicieron 32 puntos. Abajo quedaron Gerardo y Rebeca Moreno con 31 (Peugeot 206 RC), José Andrés Montalto y Daniel Álvarez con 30 (Toyota P Sport), Víctor Salazar y David Ortega con 27 (Renault Clio Sport) y Alejandro Riggioni y Roberto Yglesias con 25 (Renault Clio Sport).
Todos ellos son de la N3.
En N2, los nuevos campeones sí barrieron con suma facilidad, pues finalizaron con 59 unidades, seguidos de Andrés Molina y Eduardo Corrales con 41.5 (Citroen C3) y Neftaly García y Alex Arroyo con 18 (Toyota Tercel).
El cierre. En dicha jornada de cierre, considerada como la Gran final del ralismo costarricense, el mejor al volante fue Riggioni, quien junto a Yglesias como copiloto, realizaron el mejor tiempo a través de todo el dinámico trayecto.
Ellos detuvieron el cronómetro en un tiempo de 57 minutos, 36 segundos y una décima.
Esto gracias a que ganaron las primeras cinco etapas; empero, aflojaron el paso posteriormente, para cederle el protagonismo a los hermanos Moreno (57:46.01), quienes buscaron con todo el empuje mantener el título obtenido en la temporada del año 2008).
Los Moreno se embolsaron cuatro etapas de las cinco que restaban, pero fallaron en una (la ocho, que ganó Salazar) y eso les costó repetir en lo más alto del podio.
Tampoco pudieron celebrar en N3, ya que ahí fue Montalto el que acumuló más puntos en todo el año de competencia.
Ese fue su primer título en esta disciplina de los motores.
Al final, el joven de 19 años, hijo del multiganador Andrés Montalto, cerró la tabla con 34 puntos, los Moreno sellaron su participación con 32 y Salazar lo hizo con 27.
