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Ginebra
La investigación estadounidense del escándalo de corrupción de la FIFA dio un nuevo giro este jueves con el anuncio de la justicia suiza de la extradición el 15 de julio a Nueva York de uno de los siete responsables de la institución detenidos el 27 de mayo.
"Les informamos de que el primero de los siete funcionarios de la FIFA arrestados en Suiza ha sido extraditado a Estados Unidos el 15 de julio de 2015", indicó la Oficina Federal de Justicia (OFJ) suiza.
"Tres policías estadounidenses se hicieron cargo de él en Zúrich y le escoltaron hasta Nueva York", precisó la OFJ.
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A petición del detenido, Berna no ha publicado oficialmente su nombre.
Según el diario estadounidense Wall Street Journal, el extraditado es Jeffrey Webb, de 50 años, pero la información no ha sido confirmada por las autoridades suizas.
Webb, originario de Islas Caimán, era una de las figuras principales de la FIFA, vicepresidente de la institución y presidente de la Concacaf, federación de fútbol de Norteamérica, América Central y Caribe, en el momento de su detención.
Es la primera extradición a Estados Unidos de uno de los siete detenidos en Suiza el 27 de mayo en un hotel de lujo en Zúrich, en la víspera del congreso de la FIFA, por corrupción.
En su primera comparecencia ante la policía cantonal de Zúrich, después de su detención, el responsable en cuestión se opuso a su extradición a Estados Unidos.
Pero el 9 de julio cambió de opinión, por lo que la OFJ dio el visto bueno a la extradición en el marco de un procedimiento simplificado.
Un tribunal del distrito este de Nueva York sospecha que la persona extraditada "aceptó de empresas comerciales deportivas y se guardó para él, sobornos de varios millones de dólares a cambio de derechos de comercialización".
"Se refiere a la clasificación para la Copa del Mundo, campeonatos regionales y campeonatos continentales en Norteamérica y Sudamérica", explicó la OFJ, que subraya que "estas prácticas perjudicaron económicamente a dos confederaciones regionales de la FIFA y a diferentes asociaciones nacionales".
Preguntado por la agencia AFP, un portavoz de la OFJ, Raphael Frei, explicó que las audiencias de los otros seis detenidos, entre ellos Eduardo Li, están todavía en curso.
El proceso puede resultar bastante largo. Desde que se dio la orden de extradición, Li tenía un plazo de 14 días para tomar una decisión, pero este plazo puede ser prolongado 14 días más, bajo bases jurídicas justificadas.
Después, la OFJ decidirá "en las semanas siguientes, en base a las demandas de extradición, las audiencias a los detenidos y sus testimonios, si deben ser extraditados".
Las decisiones de extradición de la OFJ pueden ser objeto de un recurso ante un tribunal penal federal, cuya decisión todavía puede ser apelada en última instancia.
Si se acepta el recurso el dirigente es liberado, de lo contrario el Tribunal Penal Federal (TPF) entrega a la persona.
Incluso, Li puede presentar un nuevo recurso ante el Tribunal Federal (TF), aunque esto solamente se da en casos especialmente importantes. El TF tiene ldos caminos: entregar a la persona a Estados Unidos o liberarla.
Los siete antiguos o actuales responsables de la FIFA fueron arrestados en Zúrich el 27 de mayo acusados de corrupción, con una petición formal de extradicción por parte de Estados Unidos.
El 20 de mayo un tribunal del este de Nueva York emitió la orden por acusaciones de que estos funcionarios habrían recibido sobornos por más de 100 millones de dólares (90,4 millones de euros), explicó entonces la OFJ.
Además de Webb, los otros seis detenidos son Eduardo Li (Costa Rica), que era miembro del Comité Ejecutivo de la FIFA y de la Concacaf; Julio Rocha (Nicaragua), responsable de desarrollo de la FIFA ; Costas Takkas (Islas Caimán, Gran Bretaña), colaborador del presidente de la Concacaf; Eugenio Figueredo (Uruguay), vicepresidente y miembro del Comité Ejecutivo de la FIFA ; Rafael Esquivel (Venezuela), miembro del Comité Ejecutivo de la Conmebol y presidente de la Federación Venezolana, y José María Marín (Brasil), miembro del Comité de Organización de la FIFA para el fútbol olímpico y expresidente de la Confederación Brasileña (CBF).
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La tormenta provocada por las detenciones obligó al presidente de la FIFA Joseph Blatter a dimitir cuatro días después de su reelección a principios de junio. Sin embargo el dirigente suizo tiene previsto permanecer en el cargo hasta la elección de su sucesor, prevista para finales de 2015.
