Sin rematar cuesta mucho triunfar

Sí, la lucha en el medio fue intensa. Sí, se intentó jugar de pie a pie, pero a todo esto, ¿dónde quedaron los remates al arco?

Disparos directos fueron contados con los dedos de una mano y para los desviados tampoco ocupamos toda la otra.

Es más, parecía por momentos que los futbolistas querían ingresar con todo y pelota al arco, pues hubo oportunidades en que existía clara visión para soltar la pierna y no se decidían a hacerlo.

Lo único notable en el ataque fueron los dos goles, conseguidos por Pablo Brenes y Jason Scott, local y visitante, respectivamente.

A eso solo se le suma el penal universitario estrellado en el palo y una intervención por parte de cada guardameta, Alfonso Quesada que tapó un remate de Paolo Jiménez y de Carlos Díaz que desvió un misil del panameño Luis Gallardo, ambas en la segunda mitad.

A partir de ahí, los guardavallas tocaron la pelota quizás solo en flojos centros al área.

No es tan difícil llegar a deducir que de esta forma cuesta anotar y, por ende, también ganar.

Criterios. El técnico hechicero Mauricio Wright dijo, con evidente molestia, al final del encuentro que su equipo estuvo muy lejos del funcionamiento ideal y que por esa razón, aparte de una buena presión del conjunto rival, no se generaron opciones claras de gol.

“Es uno de los partidos que menos me ha gustado desde que estoy aquí”, sostuvo el exmundialista.

Por su parte, su homólogo, pero en el banquillo contrario, Johnny Chaves, estaba más tranquilo con el accionar de sus pupilos, seguramente al obtener un punto ante el actual líder del campeonato.

“El equipo mantuvo un mismo nivel de juego, por lo menos empezamos a salir de esta racha negativa” expresó el estratega celeste, que llegó a acumular cinco partidos de no ganar. Sin embargo, se sacó de encima tres derrotas al hilo.

Dicho déficit ofensivo puede que tenga únicamente una bondad: la efectividad, ya que de cinco tiros por dentro de los tres postes, dos se fueron hasta el fondo.

Actualmente, Brujas es el segundo equipo más anotador del certamen junto al Saprissa, con 16 goles, mientras que la realidad de la U es totalmente lo contrario, dado que es el segundo equipo menos anotador detrás de Cartaginés, con solo nueve festejos en la misma cantidad de partidos.

El más goleador del torneo es Liberia Mía, que llegó a 20 goles de la mano de Víctor Mambo Núñez, quien lleva la mitad de ellos.