En el equipo profesional continental Androni Sidermec determinaron que al ciclista costarricense Kevin Rivera había que quitarle cuanto antes un tumor que tenía bajo la mandíbula.
La cirugía se efectuó el viernes en Italia y aunque han pasado pocas horas, el pedalista de 18 años tiene toda la intención de subirse a la bicicleta este mismo miércoles.
"Cuando tenía como 14 años todo el mundo me decía que tenía como una glándula que se me estaba notando y que se estaba inflamando, pero yo no le daba importancia y seguía como si nada. Fueron pasando los años, se fue haciendo más grande y resulta que no era una glándula, era un tumor", relató Rivera en charla con La Nación.
Cuando él debutó con Androni Sidermec en la Vuelta al Táchira, en Venezuela, en enero pasado, en el cuerpo técnico de la escuadra de Gianni Savio lo vieron y los doctores dijeron que había que operar.
"Me hicieron venir acá rápido, se hizo la operación y todo bien, porque el tumor era benigno, pero estaba eliminándome el nervio facial y si no se quitaba, era probable de dentro de un tiempo ya no iba a poder hablar ni hacer gestos", comentó.
Y agregó: "Si el tumor me eliminaba ese nervio facial estaba listo, porque ya no iba a poder hacer nada, pero gracias a Dios ya salimos de eso y vamos a ver si este miércoles ya puedo volver a andar en bici, voy a salir a hacer una horita, suave, pero gracias a Dios la operación fue un éxito".
El ciclista tico está de muy buen humor, porque ya este martes se siente bien.
"Me quitaron el drenaje, que es como un tubito que le ponen a uno para que le baje la sangre y eso me tenía mal, porque no podía comer ni hablar. En realidad sí podía hablar, pero me dolía un montón para poder mover la lengua, porque lo que yo tenía era grande. Ya pude comer", contó.
Rivera cree que pronto regresará a Costa Rica para prepararse, porque su próxima competencia es el Tour de Jura, en Francia, pactado para el 27 y 28 de mayo.