Andrey Amador sabía que algo no andaba bien en su codo derecho, y mañana irá al quirófano, tras comprobarse que tiene una pequeña fractura.
Al ratificarse la presencia de la lesión, él prefiere que la cirugía sea de inmediato.
“Desde el domingo se sabía que había algo y ya se confirmó, así que es mejor que me operen. Lo único que me van a hacer es ponerme dos tornillos en el codo”, expresó Andrey Amador.
El nacional estaba convencido de que podía figurar en estas clásicas de primavera, en las que Movistar Team lo había inscrito como su líder sobre adoquines.
Pero Amador tampoco se atormenta, pues sabe que la caída del viernes pasado en E3 Harelbeke pudo acarrearle consecuencias mayores, así que tiene presente que el accidente le salió barato.
“Me opero -mañana- y este mismo fin de semana ya puedo estar entrenando sobre la bicicleta. Lo único que me perdí fue la Gante Wevelgem (domingo pasado), La Panne (ayer) y me pierdo el Tour de Flandes (5 de abril)”.
Si todo sale bien, Amador podría competir de nuevo en dos semanas, “aunque no tengo nada programado en el calendario”.
Para enfilarse al Giro de Italia, él hará una concentración de altura y es posible que pedalee en Asturias, del 2 al 3 de mayo.