Las medidas amplían significativamente las penalizaciones estadounidenses previas, las cuales estaban limitadas a individuos y compañías rusas . Pero los castigos nuevos no llegan a afectar completamente sectores económicos cruciales de Rusia, un paso que funcionarios estadounidenses dijeron que continuarán manteniendo en reserva en caso de que Moscú lance una invasión total a Ucrania o tome acciones similares provocadoras.
Los afectados. Las sanciones del Departamento del Tesoro tienen como blanco dos importantes compañías rusas del sector energético, Novatek y Rosneft, y un par de instituciones financieras rusas, Gazprombank y VEB. Restringen el acceso de esas entidades a los mercados de capital de Estados Unidos, dijeron funcionarios.
También fueron golpeadas ocho empresas rusas fabricantes de armamento responsables de la producción de armas pequeñas, proyectiles de mortero y tanques.
El anuncio de Estados Unidos ocurrió en momentos en que líderes europeos se reunían en Bruselas para discutir la toma de sus propias medidas encaminadas a disminuir las tensiones a lo largo de la frontera de Rusia con Ucrania.
Algunos líderes europeos han estado cautelosos en profundizar las penalizaciones contra Moscú por temor a que sus propias economías pudieran verse afectadas, dada la profunda relación comercial con Rusia. En días recientes, funcionarios del gobierno de Obama han estado pidiendo a sus homólogos europeos que presionen más, al advertir de que ellos podrían tomar acciones unilaterales si la UE continuaba vacilante.
Washington ha preferido imponer sanciones en conjunto con Europa, para presentar un frente occidental unido contra Rusia y evitar colocar a compañías estadounidenses en desventaja, al limitar su acceso a los mercados rusos mientras sus competidores europeos siguen operando sin restricciones.