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Superman ya no guarda secretos, tiene dudas y, como nunca antes en el cine, experimenta un gran conflicto de conciencia. Como la kryptonita más traicionera, el hombre de acero experimentará la encrucijada más humana de su existencia.
El hombre de acero ( Man of Steel , 2013), la nueva versión cinematográfica de uno de los superhéroes más importantes de la historia, presentará a un Superman adaptado a los nuevos tiempos, mucho más persona y enfrentando la vida sin la máscara del anonimato.
“La idea de que el mundo ya sabe quién es y que se puede permitir ser quién es, por primera vez, lo estaremos viendo en la película. Es cierto que tiene códigos morales, pero también un conflicto interno increíble”, dijo en México Henry Cavill, quien encarna a Superman.
Con Zack Snyder a la cabeza, hoy se estrena en el país la renovada historia del hijo más joven de Krypton (Kal-El), quien, sin buscarlo, deberá elegir entre su propio pueblo y el planeta que lo adoptó.
Para Kent, todo será horrorosamente simple: perpetuar a su propia sangre o hacer lo correcto.
“Clark se pregunta: ‘¿Cuál es mi propósito?’. Sabe que es extraterrestre y sabe que sus poderes pueden aterrar a la humanidad. Él está solo, tratando de encontrar su lugar en el mundo, a dónde pertenece y cuál es su identidad”, dice Snyder sobre el nuevo Superman.
En esa situación, Kent, quien desde niño se pregunta por qué Dios lo hizo diferente, deberá hacer “un acto de fe”. Mucho tiene que decidir, pues mucho se espera de él.
Desde sus orígenes en Krypton, la nueva película narrará paso a paso cómo y porqué, Kal-El (Superman) llegó de tan lejos a la Tierra. Además, el filme explica por qué el General Zod le declara una guerra mortal a Kent, y se convierte así en su primer gran enemigo.
Además de Cavill, como Clark y su álter ego de Superman, completan el reparto Michael Shannon, como el General Zod, y Amy Adams como Luisa Lane.
Por su parte, Kevin Costner y Diane Lane son los Kent, padres adoptivos del superhéroe; mientras que Russell Crowe (Jor-El) y Ayelet Zurer (Lara), sus progenitores biológicos.
¡Acción! La dinámica familiar de Kent, su convulsionado mundo interno y la ineludible conexión con la periodista Lane, marcan los derroteros de un filme donde el drama no va solo, sino que coexiste una fuerte dosis de acción pura.
Metrópolis será el centro de batallas brutalmente destructivas.
“Sabíamos que la acción tenía que ser más grande de lo normal, con emociones que te hicieran acelerar el corazón y te tuvieran en ascuas. Nunca perdimos de vista de que estábamos haciendo un filme de Superman”, agregó Snyder.
Efectivamente, las explosiones y las batallas son grandes protagonistas del filme, aunque algunos medios como Variety han señalado que se abusa de este recurso .
Otra peculiaridad de la nueva cinta es la adaptación de Supermán a la era digital. Es claro que con ordenadores y celulares inteligentes, es duro para un superhéroe mantener una identidad secreta.
“En el mundo supertecnológico de hoy, hay muy poca información que no llegue al conocimiento del público, pues, frecuentemente, es revelada y expuesta por los medios, observadores particulares o videos virales”, explicó Christopher Nolan, productor del filme.
Una impactante escena de secuestro tecnológico hará evidencia del anterior supuesto, pues el mundo conocerá a Superman de la forma menos pensada.
Lo que no cambia, dijo Cavill, es el mensaje que transmite el superhéroe de la capa roja. Superman solo tiene certeza de una cosa: la ‘S’ en su pecho significa esperanza y es lo que tiene que inyectar al mundo.
“El mensaje es el mismo que ya han mandado otros personajes mitológicos, la esperanza, que siempre hay otra oportunidad, que hay que seguir luchando y dar lo mejor de ti”, añadió Cavill.
