A dos días para el estreno de ‘Where We Are’, así suspiran las ‘directioners’

“Mami, yo le dije a usted desde hace tiempo lo de la película de One Direction y en ese momento usted me dijo que no (podía ir)”, le dijo Franciny Vega a su mamá, Hellen López, quien solo atinó a decir: “¡Es cierto!, no me acordaba”.

Vega, quien no perdió la sonrisa ante la pequeña gran verdad, es una de las cuatro fanáticas que, haciendo público su amor por la banda inglesa en Facebook, ganaron el libro Donde estamos ahora , en un concurso organizado por Viva .

Además de Vega ya recogieron su premio Ana Belén Zamora y Sharlyn López, y da la casualidad que ninguna de las tres van a ver Where We Are , el filme que se estrena este sábado en el país y que retrata uno de los conciertos de la banda británica.

“Es que no conseguí entrada”, dijo con pesar Sharlyn. “Es que no podía, tengo que estudiar y quiero eximirme”, dijo Belén, y de Franciny ya conocemos la historia. Todas estaban tristes pero extrañamente resignadas.

Tal parece que el libro autobiográfico de la banda, al que abrazaban con ternura y una emocionada sonrisa, pudo haber aliviado las penas de estas directioners , como se hacen llamar las seguidoras de la banda. No irán a ver la película pero tienen el compilado de sus ídolos.

“Ese libro ella lo quería mucho; tiempo antes lo anduvimos buscando un montón y no lo conseguimos, estaban agotados”, recordó la mamá de Sharlyn, Birnia Quirós, feliz de ver a su hija realizada.

Para Ana Belén, por su parte, el libro se sumará al altar de pósteres, fotos y demás accesorios que adornan su habitación. Ella dibuja muy bien y con ese sello personal ha ilustrado en su cuarto algunas zanahorias... “¿Zanahorias? Sí, zanahorias, es que Louis Tomlinson, integrante del grupo, ha dicho “que le gustaban las chicas que comen zanahorias”. He ahí el detalle.

Para Franciny, quien es fan de la banda desde hace tres años, el libro es una posesión muy preciada por una sola razón.

“Sencillamente, porque los amo y en la casa, por una situación en particular, no me lo había podido comprar, un asunto de dinero”, reveló con dulce sencillez.

¿Y la película? Bueno, por ahora no la verá, pero desde ahora ya planean cómo hacerse de un DVD cuando salga a la venta.

[[BEGIN:INLINEREF LNCPGL20141009_0001]]En ‘shock’.[[END:INLINEREF]] Al igual que Ana Belén, Sharlyn y Franciny, muchas de las directioners no podrán ir a ver la cinta: se quedaron sin entrada y por más que intentaron no pudieron remediar la situación.

La película se exhibirá solo sábado y domingo en las salas de Cinépolis, lo que apagó la ilusión de muchas chicas.

Sin embargo, lo que el trío de ganadoras se tomaron con tranquilidad, para otras directioners es todo un drama: ni tendrán libro ni tendrán película.

Sofía Barrientos, de 14 años, confesó que ya ha llorado lo suficiente por la inexistencia de un boleto en sus manos y advirtió con seriedad y atisbos de rabia que ya no quería hablar más del tema. Le duele, le duele mucho.

Ese sentimiento, clavado en el alma de esta adolescente, no sorprende si consideramos una cosa: muchas de las directioners afirman con seguridad que los One Direction “son su razón de vivir”.

Si no lo creen, pregúntenle a Ana Belén, quien de su puño y letra escribió lo siguiente: “ellos hacen que mis días tengan sentido”.

La otra cara. Por otro lado, las que sí verán la esperada película no hacen más que contar los días, las horas y los minutos.

“Di, es que aquí no vienen y no creo que vayan a venir nunca. Para peores uno no tiene plata para irlos a ver a otro país. Entonces di..., una para la película se prepara como si fuera para un concierto real”, explicó con una pícara sonrisa Noemy Salas, de 15 años.

En la caravana de la locura –que incluirá gritos, besos al aire y algunos piropos pasados de tono– se encuentra montada Claudia Morales, de 14 años, y al menos otras 1.000 chicas más.

Morales, con entrada en mano, ya tiene lista la camiseta, la bufanda y la pulsera que llevará el día de la premier.

“Ya lo tengo todo apartado, listo en el armario. Dios guarde se me quede nada. Es que los amo, los amoooo”, confiesa la niña.

Salma López, por su parte, sabe muy bien lo que vestirá ese día: una camiseta blanca con el logo de la agrupación, además de un pantalón y zapatos negros.

López irá al cine con cinco amigas y lo único que espera es “sentir lo mismo que se sentiría en un concierto en vivo”.

“Quiero pasar un gran momento. Algún día espero ir a uno de los conciertos, tengo fe, pero no lo veo muy posible”, agregó.

Además, Salma ya preparó su garganta para los gritos de rigor y no dejará pasar la oportunidad para participar en las actividades previas a la función, que incluirá concursos, rifas, charadas y el disfrute de algunos covers de la banda.

“Si puedo participar, no hay duda de que lo haré, todo sea por ganarme algo de One Direction”, finalizó ilusionada.