New Balance prefirió no arriesgarse con un diseño atrevido y apostó por una indumentaria sencilla para vestir a todas las selecciones nacionales de fútbol.
Eso sí, la marca aplicó toda la tecnología que utiliza en el atletismo –su especialidad– para desarrollar este uniforme.
Iván Villalaz, representante de New Balance, afirmó que no quisieron experimentar en el diseño, en gran medida por las críticas que recibió Lotto cuando presentó la camiseta que utilizó Costa Rica en el Mundial de Brasil 2014, con una extravagante franja azul en el centro.
“En el inicio, quisimos no experimentar y no inventar, hacer un diseño limpio, que identifique a la afición costarricense”, comentó Villalaz. De igual manera, aseguró que se asemeja a la de Panamá por los colores que representan a ambas selecciones; no obstante, asegura que el estilo es distinto.
“Si bien es cierto hay similitudes en los tonos, los diseños son totalmente diferentes”, añadió .
Además, el corte de la vestimenta de hombres y mujeres varía, un factor que destacó la seleccionada Raquel Rodríguez, quien aseguró que en el pasado eran iguales para ambos géneros y esto no favorecía a las seleccionadas.
“El cuerpo es distinto y por lo tanto, el diseño debía ser diferente. Me gusta que este se adaptó a nosotras. Realmente se preocuparon por el diseño de la Femenina”, aseguró Rodríguez.
Tecnología. La camiseta utiliza la tecnología nb dry, que favorece el secado rápido, además de una tela sumamente liviana y una malla a los costados de la casaca que aumenta la ventilación. Todo esto se aplica habitualmente en el atletismo.
El seleccionado nacional José Miguel Cubero manifestó que este uniforme se ajusta mejor al cuerpo que el anterior. El volante de contención añadió que, “el equipo siempre pensó en tener una vestimenta sencilla pero cómoda. Se quería algo más ajustado porque a veces cuando uno sudaba había que enrollar las mangas y estorbaba un poco”, dijo.
El valor de la prenda es de ¢43.900 y se puso a la venta ayer, en las tres tiendas New Balance del país. Sobre el precio, Villalaz reconoció que un sector de la afición lo iba a considerar caro. No obstante, dice que se ajusta a la calidad de la tecnología.
La camiseta Lotto que se usó en el Mundial costó ¢39.900. “El costo sabíamos que iba a impactar un poco, pero realmente vale la pena la camiseta, vale la pena la tecnología. Invitamos a la afición para que la vea y tenga su criterio”, finalizó.