Una noche de setiembre del 2008 tantas, en el estadio Ricardo Saprissa, Giancarlo González la pasó francamente mal. Irse de cambio con poco más de media de hora de juego en un clásico, para que su salida tapara el hueco que significaba su presencia, fue un golpe en mala parte.
Digamos que Pipo vio el vaso medio lleno luego de aquella noche triste.
No volvió a tener una jornada como aquella por dos razones; una, porque era difícil que repitiese una actuación tan mala; otra, porque fue autocrítico (una rareza en el fútbol de Costa Rica), aprendió y corrigió .
Hoy, el zaguero es indiscutible en la zaga de la Tricolor, fue parte de la gesta en Brasil 2014 y su carrera dio este mismo año un salto cualitativo al recalar en el Palermo de Italia , luego de apenas unos meses en la MLS de los Estados Unidos.
La llegada del zaguero fue un acierto de la dirigencia del equipo de la maglia rosa, que apuró los trámites al ver la clase de torneo que jugó en Brasil. El Columbus Crew no lo pudo retener, a pesar de que había llegado en febrero de este año.
Para decirlo en términos futboleros, esa oportunidad de fichaje los italianos no la dejaron “ni picar, porque en este deporte el “pez grande” se come al “pez chico”..., y sin agruras.
Una lesión le atrasó el estreno al Pipo en el calcio ; sin embargo, el día de su debut dejó su tarjeta de presentación: titular, juego completo, gol al minuto 90’ y victoria para su club.
El Palermo afianzó su retaguardia con el tico y desde entonces solo registra una caída : ante la poderosa Juventus de Turín. Nada que reprochar, porque en Italia nadie puede con la Vieja Señora.
Las cosas le pintan bien al Palermo, una squadra que regresó esta temporada a la Serie A y que no contempla un pronto regreso a la Serie B.
En la actualidad, está en el puesto 12 de la tabla y ahora le apunta a conseguir una plaza entre los 10 primeros, lo que sería todo un éxito.
Un paso en esta dirección será el partido de este domingo 30, en casa, ante el colero del campeonato, Parma.
Véalo. Serie A. DOMINGO 30. FoxSports 3. 7:55 a. m.
El Matador se le metió al tren
Ricardo Mayorga debió ser un campeón mundial de boxeo de la talla de Roberto “Mano de Piedra” Durán y Alexis Argüello, sin exagerar.
Lo que pasó es que el Matador careció de la disciplina de sus ilustres antecesores y se perdió en su papel de “chico malo”. Una lástima.
Mayorga fumaba y bebía y no le importaba hacerlo sobre el propio “ring”. Como parte de ese personaje que construyó, Ricardo Mayorga gustaba de insultar a sus rivales.
No respetaba hojas de vida y se comportaba como matón de esquina, amparado a su devastadora pegada y su confianza sin límites.
Cuando aplicó la incontinencia verbal con Óscar de la Hoya, este se “cabreó” en serio: “Solo una vez he sentido furia contra alguien; ese fue Fernando Vargas y lo noquee, pero este tipo (Mayorga) es todavía peor”.
Recuerde cómo el “Golden Boy” se sacó el enojo ante Ricardo Mayorga este martes 2 por Fox Sports 2.