La legión centroamericana se hizo sentir en La Sabana

Por aire y tierra Mientras unos compraron su entrada por Internet y arribaron en avión, otros viajaron en motocicleta o en bus a San José

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El único concierto de la legendaria banda Black Sabbath en Centroamérica, no podía pasar por alto y, en este caso, para los metaleros de corazón de todo el istmo, se aplica aquel refrán que dice: “Si Mahoma no va a la montaña, la montaña va a Mahoma”.

Es por eso que muchos emprendieron el viaje sin dudarlo hasta el Estadio Naciona l, ya sea con la entrada en mano o sin ella.

Un trío de amigos, dos nicaragüenses y un costarricense, salieron con sus motos pandilleras desde Managua, para acudir a la cita con los padres del heavy metal .

Eso sí, para saciar su sed musical tuvieron que lidiar con la lluvia y el frío.

“Viajamos 12 horas desde Nicaragua para llegar hoy al mediodía (ayer para los lectores). Nos retrasamos un poco porque nos acompañó la lluvia en el camino, pero todo sea por ver este concierto. Es un sacrificio, pero por ellos es que estamos aquí. Compramos las entradas Súper Fan (las más caras a ¢77.000 de pie frente a la tarima) desde junio, apenas salieron”, explicó Abel Hernández, administrador de negocios que viajó con su paisano René Zamora, un psicólogo, y con el costarricense Andrés Rojas.

Manolo Meoño, quien portaba una bandera de Guatemala, llegó desde el domingo en avión.

“Me encontraré con otros guatemaltecos aquí. Es histórico ver a tres integrantes de una de las mejores bandas en la historia del metal , Ozzy, Tony y Geezer, después de tantos años separados. En mi país vi a Metallica, Megadeth , Apocalyptica, pero este es el concierto que estoy esperando, y algún día espero ver a Iron Maiden”, confesó este estudiante de Ciencias y Letras con entrada de Súper Fan a mano.

Fuerza catracha. Un grupo de ingenieros civiles arribaron desde el lunes vía aérea desde Tegucigalpa, para que nadie les cuente cómo estuvo el concierto.

Orlando Moya, sus hijos Rolando y Luis Fernando, José Morazán y José Varela, son cinco hondureños que desde el primer día en que sacaron a la venta las entradas por Internet se pegaron a su computadora y compraron las entradas más caras frente a la tarima para el show de anoche.

“Desde que sacaron los boletos en junio, a medianoche empezamos a comprar, no se pudo y se logró como a las 8 a. m. Todos pedimos vacaciones para estar acá. En mi caso, hace 40 años quiero verlos. Es la mejor banda de todas, luego le sigue Led Zeppelin, pero Black es lo más heavy , los precursores del género; luego, los demás empezaron a imitarlos, pero ellos iniciaron todo”, dijo Orlando Moya, de 54 años.

Por otra parte, Óscar Mendoza, alias Elimination, es un periodista panameño de la emisora on line Euforia Metal, y produce el programa Sangre roquera . Él era uno de 10 canaleros que llamaron a su visita la “peregrinación metalera ”.

“Somos unos 50 panameños que vienen en bus y avión. Vine a trabajar y a disfrutar de este grupo leyenda. Yo vine en bus, fueron 16 horas. Si ves, lo importante aquí es que Black Sabbath une a todos los países que en algún momento los aleja una bandera, eso es lo más destacable, esta unión”, dijo Mendoza.