Criminales irrumpen en casa y asesinan en la ducha a empleado de bar

Entraron con cascos de moto puestos preguntando por la víctima, quien tenía apenas una semana de vivir en la casa

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Un hombre identificado como Norman Yoel Vargas, de 22 años, murió luego de que unos criminales entraron en su casa y lo asesinaron mientras se daba una ducha. El hecho ocurrió la noche del viernes a las 7 p. m en Puerto Viejo de Sarapiquí, Heredia.

Vargas falleció cuando era trasladado al Hospital de Guápiles. De acuerdo con el Organismo de Investigación Judicial (OIJ) Vargas, un impacto de bala en la cabeza.

Al parecer, llegaron dos hombres a bordo de una motocicleta con los cascos cerrados e irrumpieron de manera violenta en la vivienda.

Al entrar, preguntaron por Vargas refiriéndose a un apodo y su compañera sentimental les indicó que a él no solían llamarlo de esa manera, pero que estaba en el baño; lo buscaron y le dispararon en la cabeza para darse a la fuga con dos celulares del ofendido.

“Supuestamente, Vargas habría llegado a alquilar la casa hace una semana, pues antes vivía en San Carlos. En Puerto Viejo, laboraba en un bar de la zona. Agentes del OIJ de Sarapiquí buscan a los sospechosos del crimen”, agregó el OIJ.

En junio pasado, también en Sarapiquí, falleció un conductor de un vehículo de carga liviana, el cual apareció con al menos cinco impactos de bala en la puerta y al costado izquierdo del lado del chofer.

En la revisión del cuerpo, los agentes no hallaron balazos, ni tampoco heridas de arma punzocortante. La Policía presumió en ese momento, que al hombre, identificado como Alexánder Venegas Espinoza, de 46 años, lo interceptaron en la madrugada y al oír los disparos aceleró para huir, hasta que perdió el control del vehículo y se fue contra una cerca de alambres de púas.

Antes de chocar contra uno de los parales de la cerca, el carro pasó por un montículo al lado de un poste de alumbrado público y quedó en el lugar con las luces encendidas.

Otro caso se registró el 17 de mayo en La Virgen de Sarapiquí, donde ultimaron de tres balazos al motociclista Olger Eduardo Quesada Rivera, de 39 años. La Cruz Roja confirmó que el sujeto fue declarado fallecido en el lugar. Aparentemente, fueron los vecinos quienes dieron aviso a las autoridades, cuando escucharon varios disparos.

En el 2022, Costa Rica reporta 362 homicidios. En el cantón herediano de Sarapiquí, se contabilizan cinco homicidios en este año. El director del OIJ, Walter Espinoza, dijo en el Congreso que, de mantenerse la creciente tendencia de homicidios, el país registraría 605 al terminar el año.

“El aumento es representativo en cantidad, por lo que realmente hay que prestar atención a las áreas álgidas y preocupantes, porque para allí debemos dirigir la visión”, manifestó el jerarca judicial, quien se mostró preocupado por el aumento en el nivel de violencia en los crímenes.

“Hemos visto quemados, decapitados, personas a las que le han sacado los ojos en vida y luego son asesinados; uno podría pensar que es un aspecto fenomenológico, pero esto revela que el país tiene una situación de problema”, afirmó Espinoza, al tiempo que mostró a los congresistas unas imágenes de un caso en el cual los médicos forenses tuvieron que atar cabos para determinar cuántas víctimas se dieron en un caso.