La pandemia provoca un atraso en los planes de Alajuelense y la Asamblea de asociados que en principio se había pensado para mayo ahora se proyecta para mediados de julio.
El tema principal es someter a votación el proyecto de un nuevo estadio pensado como un centro de entretenimiento y cuya construcción costaría $30 millones, justo al frente del Centro de Alto Rendimiento (CAR) en Turrúcares, con un aforo para 24.000 personas.
Pero todo se encuentra en ‘stand by’, porque son los socios quienes con su voto decidirán si se procede o no con ese inmueble.
La Liga cuenta con dos tipos de asociados. Los mantenedores tienen voz en las Asambleas; mientras quienes tienen dos años consecutivos de estar asociados pueden solicitar su cambio de estatus a la Junta Directiva, para pasar de mantenedores a activos. Con eso, ejercen su privilegio de opinar y votar.
“Seguimos coordinando, hay una fecha tentativa del 17 de julio, que todavía estamos conversando con las autoridades del Centro de Convenciones, que es de los pocos lugares donde se puede hacer esta asamblea”, expresó a La Nación el presidente de Alajuelense, Fernando Ocampo.
En este momento, el club tiene unos 800 liguistas dentro del rango de socios activos y pensar en cómo hacer esa asamblea respetando las regulaciones actuales por la covid-19 no resulta sencillo.
“Ya más o menos para esas fechas con las restricciones que están anunciadas habría un poquito más de libertad y estamos revisando todos los ajustes para poder hacer esa asamblea a mediados de julio y que podamos seguir avanzando con los proyectos que se han planteado”, citó el jerarca manudo.
Además, en abril, el fiscal Manrique Lara señaló que por las directrices del Ministerio de Salud que todos conocemos solo se pueden incluir en un recinto al mismo tiempo a 300 asociados.
“En los más de 35 años que tengo de asistir a asambleas de asociados de Liga Deportiva Alajuelense, probablemente solo en una llegamos a tener, si la memoria no me es infiel, aproximadamente unos 500 asociados, que traería un problema de tipo operativo”, citó Lara.
Otro tema no menos importante es la aprobación de la reforma a los estatus del club, porque los vigentes datan de 1993 y con el paso del tiempo algunos ajustes se vuelven necesarios.
Además, como ha costado tanto efectuar la asamblea, en la Liga planean que ese encuentro sea multipropósito y Ocampo considera que sería muy sano someter a votación su cargo y el de otros directivos cuyo periodo se venció en noviembre anterior.
“Yo soy de la tesis de que debemos de aprovechar esa asamblea para hacer la elección, el fiscal (Manrique Lara) está revisando cómo aprovecharla, sobre todo porque nos hemos atrasado con esa elección y aunque hay una extensión del mandato, yo soy de la tesis de que si vamos a presentar un proyecto como el estadio, lo menos que debemos hacer en la Junta Directiva es someter a consideración estos nombres para ver si tenemos el respaldo de la Asamblea para seguir adelante”, mencionó Ocampo.
La emergencia sanitaria provocó que, ante ante la normativa para evitar conglomeraciones, se emitiera una regulación en cuanto a los nombramientos en juntas directivas.
“Se tiene por prorrogado de forma automática, hasta por seis meses, el nombramiento de los órganos esenciales de todas las asociaciones, federaciones y confederaciones que se encuentren debidamente inscritas en el Registro de Personas Jurídicas al amparo de la Ley 218, Ley de Asociaciones, de 8 de agosto de 1939, que hayan vencido a partir del 1°. de marzo de 2020 y venzan antes del 31 de diciembre de 2020 inclusive, a menos que las medidas sanitarias definidas por el Ministerio de Salud permitan a la organización la realización de la asamblea”, versa en la Ley 9844, publicada el 30 de abril en La Gaceta.
Ese es el motivo por el que la presidencia de Fernando Ocampo se extendió en principio hasta mayo de 2021, igual que los cargos de Guillermo Cornejo (secretario), Sebastián Trigueros (prosecretario), Federico Calderón (vocal I), José Cabezas (vocal II) y Manrique Lara (fiscal).
Pero la situación epidemiológica se agravó en el país y se aplicó lo que ya se había dejado entrever que era la prórroga de otros seis meses mediante la resolución del Ministerio de Salud número MS-DM-KR-5217-2020.
Es decir, por Ley, la Junta Directiva de Alajuelense está nombrada tal cual hasta noviembre próximo.
“A mí no me hace mucha gracia estar en el puesto nada más porque se extendió. Yo creo que parte de lo que ha sido Liga Deportiva Alajuelense es la posibilidad de que los asambleístas definan siempre quiénes son las personas para dirigir en una determinada coyuntura al equipo. Y desde esa perspectiva, creo que si vamos a hacer una asamblea, debemos de aprovechar también y hacer la elección que corresponde. Yo espero que el fiscal que está realizando esto tenga su propuesta lo antes posible para poder comunicarlo a los asociados”, comentó Ocampo.
Según los estatutos de Alajuelense, los directivos solo pueden estar seis años consecutivos en un mismo cargo (tres periodos).
Es decir, en caso de que la Liga logre realizar la asamblea y que se efectúe la votación, si ellos resultan electos de nuevo, Ocampo, Cornejo, Trigueros, Calderón, Cabezas y Lara estarían en sus cargos actuales hasta noviembre de 2022.
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