Alajuelenses hacen fila de hasta tres horas o esperan sentados en el piso para recibir atención de especialistas en hospital

Nueva consulta externa del Hospital San Rafael, inaugurada hace un mes, está saturada; espera por medicinas pasó de dos a cuatro horas

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Alexánder Soto sufrió un majonazo en sus pies mientras estaba sentado en el piso de la nueva consulta externa del Hospital San Rafael, en Alajuela.

Iban a ser las 11 a. m. del martes 15 de mayo, y Soto acumulaba tres horas de espera.

Aunque ya había sido atendido en Psiquiatría, contó, las largas filas que hay que hacer para entregar la cita y sellar los papeles para las recetas de farmacia y los exámenes médicos obligan a los pacientes a permanecer de pie varias horas ante la falta de espacio en ese lugar.

Él recurrió a descansar un rato en el piso. Ya no aguantaba los pies. Pero alguien se los majó sin culpa, intentando quitarse a otra persona en el segundo piso del hospital.

La gente se ve apretujada y el lugar zumba como un mercado persa tan solo un mes después de abrir diez consultorios nuevos.

En promedio, ahí se dan 640 citas diarias. Se calcula que unas 1.700 personas circulan por esos consultorios cada día, si se toma en cuenta que cada uno de esos 640 pacientes con citas programadas viene acompañado de al menos una persona.

El director médico del Hospital San Rafael, Francisco Pérez Gutiérrez, informó de que la construcción de diez consultorios costó a la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS) ¢380 millones. Estas oficinas se suman a otras 16 que ya existían.

Las instalaciones empezaron a funcionar hace un mes como resultado de un proceso que tardó 13 años en resolverse: el traslado de siete especialidades médicas que el hospital tenía en la Clínica Marcial Rodríguez.

Esa clínica había prestado temporalmente un área de su edificio para que el hospital San Rafael pusiera a funcionar parte de su consulta externa pues las nuevas instalaciones hospitalarias que les entregaron en el 2004 nacieron sin el espacio suficiente para albergar todas las especialidades.

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Ese fue uno de tantos fallos de origen de la multimillonaria obra, hija de la extinta gerencia de Modernización de la Caja, la misma que lideró los préstamos español y finlandés.

El préstamo de las instalaciones de la Marcial Rodríguez, que se iba a prolongar unos cuantos meses, se extendió más de una década, generando problemas, principalmente, a los asegurados, quienes tenían que caminar casi dos kilómetros entre hospital y clínica, bajo el sol o la lluvia, para jalar expedientes, retirar medicinas y coordinar citas.

En un intento por facilitar la vida a los asegurados, y porque la Clínica reclamaba su espacio para la apertura de nuevas sedes de Ebáis, la Caja construyó los diez nuevos consultorios y trasladó las especialidades de Vascular Periférico, Reumatología, Gastroenterología, Medicina Interna, Psiquiatría, Neurología y Endocrinología.

"No se trataba de trasladar solo a los médicos (alrededor de 20), sino que necesitábamos el personal de apoyo para dar esas consultas (enfermeras, personal de archivo y de redes). La CCSS nos dio 43 plazas, aunque nuestra solicitud original fue de 67", explicó Francisco Pérez.

Su asistente en la dirección, Marcela Leandro, confirmó que la espera en servicios como Farmacia se ha duplicado desde entonces, a pesar de que se reforzó un poco el personal en esa área.

Se pasó, dijo, de menos de dos horas a cuatro. "Algunos prefieren venir al día siguiente a recoger las medicinas", aseguró Leandro.

"Hemos tenido que pedir a la gente que venga solo con un acompañante. Ahora, hay más congestionamiento y no hay posibilidades de crecer porque ya no hay más espacio", confirmó Pérez.

Con dolor de pies

El martes era la tercera vez que Silvia Redondo acudía a la cita de Psiquiatría con su hijo.

Según contó esta vecina del INVU Las Cañas, la primera vez llegaron a las 7 a. m. y salieron a las 3 p. m. El martes esperaban tener mejor suerte.

"El problema es esa fila, ahí hay que esperar horas porque son pocas secretarias para la cantidad de especialistas que tienen. Ellos no dan abasto. En la Marcial Rodríguez la atención era más expedita", dijo con cierto tono de molestia.

María Balladares extraña las sillas que antes había para hacer la fila en Ortopedia. Ahora, es a pie porque el espacio donde estaban los asientos fue ocupado por la nueva estructura con los diez consultorios.

"Ya me duelen los pies de estar haciendo fila. Llevo casi dos horas", aseguró esta vecina del barrio San José de Alajuela.

El paciente debe hacer una fila para anunciar que llegó a la consulta y le traigan el expediente físico. En esto puede tardar más de una hora, dependiendo de la cantidad de personas.

A lo anterior, debe sumar la espera para que lo llame el médico y las horas de fila para entregar el expediente y obtener en sello para los formularios de farmacia, laboratorio y para que le programen la nueva cita.

"Quisimos ayudar a la gente y más bien nos están llegando con quejas a la Dirección por las largas esperas, las filas muy largas, las demandas de los adultos mayores y embarazadas, y la falta de espacio para sentarse", dijo el jerarca hospitalario.