Contraloría vuelve a señalar errores en construcción de carreteras nacionales

Auditoría estudió 21 proyectos ejecutados por Conavi y MOPT; 17 obras se desarrollaron sin análisis de ingeniería previos a la elaboración del cartel de licitación

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Una vez más, la Contraloría General de la República (CGR) señaló los errores y deficiencias en la ejecución de infraestructura vial del MOPT y el Conavi.

Una auditoría publicada este jueves 26 de octubre por la CGR, halló una larga lista de problemas en 21 obras viales analizadas. Los fallos no son menores, pues desembocan en atrasos en la entrega e incrementos en su costo.

¿Por qué pasa eso? El informe de la Contraloría apunta hacia la raíz de los proyectos: 17 de las 21 construcciones analizadas no tuvieron estudios de ingeniería previos a la elaboración del cartel de licitación.

Sin análisis previos, dijo el ente contralor, el resto de la obra enfrenta “un alto nivel de incertidumbre en el alcance, presupuesto y plazos”.

Además, ese yerro imposibilita precisar los riesgos del proyecto porque no se cuenta con suficiente información.

“A modo de ilustración, se identificó que la Administración incurrió en el gasto de ¢1.437 millones por concepto de diseños definitivos que no han sido construidos por no tener asegurada la factibilidad y viabilidad y cuyos diseños han quedado desactualizados”, enfatiza la auditoría.

Entre los 21 proyectos inspeccionados está el nuevo corredor vial San José-San Ramón y sus radiales, la ampliación de la ruta 32, los pasos a desnivel en las Garantías Sociales, La Bandera y Guadalupe; el nuevo puente sobre el río Virilla (Saprissa), el puente sobre el río Virilla en Lindora y la ampliación de la sección Barranca-Limonal, entre otros.

Por ejemplo, de los mencionados solo la nueva carretera entre la capital y San Ramón realizó todos los estudios previos como detalles topográficos, geométricos, geológicos hidrológicos e hidráulicos. El resto solo completó alguna de esas evaluaciones o ninguna.

El 81% de los proyectos analizados no tenía ningún estudio previo.

Por si eso fuera poco, en seis de los proyectos, el Ministerio de Obras Públicas y Transportes (MOPT) y el Consejo Nacional de Vialidad (Conavi) no lograron presentar documentos que demuestren la revisión final de los diseños, es decir, se construyen sin tener una aprobación formal de los planos.

También señalaron que, con frecuencia, los diseños de una obra están desactualizados al momento de la construcción, ya que pasan hasta 24 meses desde su aval hasta que se gira la orden de inicio para la construcción.

En la evaluación hecha por la CGR queda claro que las instituciones a cargo se brincan etapas de los proyectos.

Los manuales de buenas prácticas establecen que las bases de un proyecto incluyen la idea, los estudios preliminares y el anteproyecto, pero en el MOPT y Conavi suelen quedarse solo en la idea y la confección de un perfil.

“La auditoría realizada identificó que la gestión institucional carece de procesos bajo un enfoque sistemático, a partir del desarrollo del ciclo de vida del proyecto de manera que el producto de una etapa sea el insumo para la siguiente, a partir de la evaluación de riesgos y la selección de la alternativa que ofrezca un mayor beneficio social y ambiental con un grado de certidumbre aceptable, de conformidad con el marco legal y técnico”, agrega el documento publicado este jueves.

Se intentó consultar a Mario Rodríguez, director ejecutivo del Conavi, pero no contestó las llamadas realizadas a su teléfono celular.

Para remediar los problemas, la CGR dispuso que el MOPT deberá elaborar manuales para la gestión de la fase de preinversión de los proyectos y elaborar una matriz de gestión de riesgos.