Justicia de España niega condición de eurodiputado a dirigente catalán

Tribunal Supremo descarta liberación de Oriol Junqueras y desafío fallo del Tribunal de Justicia de la Unión Europea

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Madrid. El Tribunal Supremo español se negó este jueves a reconocer como eurodiputado al independentista catalán Oriol Junqueras debido a su condena a 13 años de cárcel e inhabilitación para ejercer cargos públicos por el intento de secesión de Cataluña en 2017.

En consecuencia, los magistrados descartaron liberarlo para que asuma sus funciones como parlamentario europeo como solicitaba su defensa después de un fallo favorable de la justicia europea, el 19 de diciembre.

En él, el Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE), con sede en Luxemburgo, estimó que Junqueras contaba con inmunidad al resultar elegido en los comicios al Parlamento europeo en mayo y debería haber podido abandonar la prisión preventiva para asumir sus funciones.

Si bien no ha modificado la situación del líder encarcelado, esta decisión abrió las puertas de la Eurocámara a otros dos independentistas, Carles Puigdemont y Toni Comín, quienes se fueron a Bélgica tras el intento de secesión de Cataluña para eludir la acción de la Justicia.

Ambos fueron elegidos eurodiputados, pero no volvieron a España para cumplimentar los trámites que, según la ley de este país, son necesarios para adquirir la condición de parlamentarios.

El 13 de enero se los espera en Estrasburgo para asistir al pleno del Parlamento Europeo, que también había preparado todo en caso de que la Justicia española permitiera a Junqueras completar los trámites como eurodiputado.

En su sentencia, el TJUE estipuló que la inmunidad de Junqueras implicaba el levantamiento de su prisión provisional, pero delegaba en el tribunal sentenciador “apreciar los efectos” de esta inmunidad en la actualidad, cuando ya existe una condena de cárcel firme.

El Tribunal Supremo, que entre febrero y junio del 2019 juzgó a la cúpula independentista por el intento de secesión, desestimó en su momento la liberación pero, tras un recurso de la defensa de Junqueras, preguntó al TJUE sobre el alcance de dicha inmunidad.

Sin embargo, el proceso no se detuvo y en octubre Junqueras y otros ochos dirigentes fueron condenados a altas penas de prisión por sedición y, en algunos casos, malversación.

Condena en firme

La condena también incluía la inhabilitación de los líderes separatistas para ejercer cargos públicos, hecho sobre el que el Tribunal Supremo argumenta ahora el no reconocimiento de Junqueras como eurodiputado.

“La Sala acuerda que no procede la libertad de Oriol Junqueras (...) una vez que ya está condenado en firme a la pena de 13 años de prisión y que dicha condena conlleva la exclusión de la condición de eurodiputado que le reconoció el tribunal europeo”, argumentó un comunicado del tribunal.

Además, añadió, la inmunidad que le concedía el TJUE por su condición de eurodiputado “no era un blindaje frente a la sentencia que puso término al proceso”.

También descartó declarar nulo el juicio alegando que quedó visto para sentencia el 12 de junio, un día antes de que fuera proclamado oficialmente como eurodiputado electo.

Encarcelado desde noviembre del 2017, Junqueras fue vicepresidente del gobierno regional dirigido por Puigdemont y es el presidente del partido separatista Izquierda Republicana de Cataluña (ERC).

"La injusticia española vuelve a desobedecer las instancias internacionales, impide a los ciudadanos ser representados y vulnera, de nuevo, los derechos de Oriol", tuiteó la cuenta oficial de ERC.

Su agrupación es actualmente pieza indispensable de la amalgama de partidos que llevó esta semana al socialista Pedro Sánchez a la presidencia del Gobierno español, en coalición con el partido de izquierda radical Podemos.

El Partido Socialista Obrero Español (PSOE) de Sánchez y ERC pactaron la creación de una mesa de negociación para “encauzar el conflicto político” en la rica región nororiental, que cuenta con 7,5 millones de habitantes.

En un gesto que la oposición de derecha a Sánchez vinculó a su acercamiento con el partido independentista, la Abogacía del Estado, que representa los intereses del gobierno en asuntos jurídicos, había pedido al Tribunal Supremo autorizar una salida temporal de la prisión para Junqueras para asumir el cargo de eurodiputado.