Redacción
El primer lunes de mayo de cada año es la fecha marcada con dorado en el calendario de cualquier fanático de la moda. Oficialmente, en esta fecha se celebra una gala en beneficio del Costume Institute, rama dedicada al diseño de moda del Museo Metropolitano de Arte de Nueva York, el Met. Pero bien sabemos que estamos atentos porque es la alfombra roja más extravagante del año.
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Así es la "Met Gala", como es conocida, al menos desde 1999, cuando la editora de Vogue (Estados Unidos), directora creativa de Condé Nast y emperatriz extraoficial de la moda, Anna Wintour, empezó a encargarse de la organización del evento. Con la gala se inaugura la gran exposición anual de alta costura y diseño del museo.
Este año, la muestra es Rei Kawakubo/Comme des Garçons: Art of the In-Between, dedicada al trabajo de la diseñadora japonesa Rei Kawakubo, una de las diseñadores más influyentes e innovadores del mundo desde 1969. Se tiene gran expectativa por esta exposición, que revisará la labor de una innovadora diseñadora que nunca se ha preocupado por seguir las reglas: sus creaciones pueden parecer estrafalarias ensoñaciones, pero es seguro que nadie las hace como ella.
Las exposiciones de moda del Met alimentan con frecuencia revisiones históricas y debates en los estudios de la alta costura y la moda (el año pasado, Ángela Hurtado Pimentel reseñó en Áncora las relaciones entre moda y tecnología mostradas en Manus x Machina).
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Pero a lo que vinimos por ahora: la alta costura en la alfombra roja. Entre otras estrellas, los anfitriones del 2017 son Tom Brady, Gisele Bündchen, Katy Perry y Pharrell Williams; Kawakubo y Caroline Kennedy, exembajadora estadounidense en Japón, son codirectoras honorarias del evento.
Nadie sabe qué ocurre dentro del museo. Bueno, sí: en esencia, se sirven cocteles, los famosos se divierten y algunos aprecian las piezas exhibidas. Pero a quienes quedamos por fuera –y nadie entra sin invitación y aprobación de Wintour–, la alfombra roja ha venido a reunir a las celebridades más brillantes.
Año tras año, las más despampanantes estrellas compiten por lograr el look más hermoso, más llamativo o más inexplicable del año. Centenares de cámaras se alinean junto a la entrada para capturar los vestidos en toda su gloria.
Se estila vestirse acorde con el tema: en el 2015, famosas como Rihanna deslumbraron con evocaciones de la China Imperial, mientras que el año pasado otras como Lady Gaga y Zayn Malik aprovecharon (¡o abusaron!) del tema tecnológico para deslumbrar.
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A continuación, algunas de las imágenes de esta edición, celebrada este lunes 1.° de mayo. Rihanna gana la noche, hasta ahora, con un diseño de Rei Kawakubo que, fuera de la pasarela, solo ella podría hacer lucir tan espectacular. Kim Kardashian optó por el recato esta vez, con un blanco absoluto de Vivienne Westwood. Cara Delevingne nos cegó con tonos plateados y, fácilmente, ganaría la noche, de no ser por Rihanna, naturalmente.