El uno a uno de la Selección ante Corea: ‘Se cambió de sistema, pero los problemas en ofensiva siguen’

Johnny Chaves, técnico nacional, resaltó que Costa Rica fue plana en su fogueo ante Corea y le faltaron recursos en ataque, aunque pasó del 1−5−4−1 al 1−4−4−2

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Se habló mucho de un cambio de sistema y Costa Rica lo varió ante Corea del Sur, al pasar del tradicional 1−5−4−1 de los últimos ocho años a un 1−4−4−2. Sin embargo, no es solo modificar, es generar patrones y movimientos en defensa y en ataque para que funcione el esquema que se elije y dé los frutos en ambas fases del partido.

Por sí solo cambiar el planteamiento no va a funcionar, es vitar establecer desplazamientos vivos y más aún ante un oponente que arma un buen bloque, presiona mucho, tiene velocidad y dinámica. Al final se varió, pero los problemas en ofensiva siguen en la Selección y tampoco se tuvo toda la solidez en defensa.

La Tricolor fue muy plana. Con la alineación inicial se tenía un delantero centro, un 10, dos volantes rápidos por afuera y dos mediocampistas centrales; no obstante, se quedaron muy estáticos en sus posiciones y no tuvieron la movilidad requerida. Al quedar todos aislados, la Sele no pudo generar peligro real, la posesión fue muy baja y el tiempo con la pelota fue reducido.

David Guzmán tenía la orden de bajar para sacar la pelota, pero con esto hizo que se quedara en desventaja en la medular. Faltó generar líneas de pase, que los volantes por afuera vinieran a recibir o se mostraran y que fueran los centrales los que salieran con el balón y así tener superioridad.

Aunado a esto, la zaga sufrió cuando le filtraban la esférica a las espaldas. Los coreanos abrieron la cancha, movieron de un lado a otro a Costa Rica y aprovecharon la rapidez y falta de colaboración defensiva en los costados.

Incluso, la Nacional falló en la presión alta porque no estuvo compacta para ejecutarlo. La línea del fondo no salía coordinada con el resto y ahí venían los problemas, tal y como pasó en el segundo gol. Al final prefirieron quedarse más atrás por temor a la velocidad del oponente.

Análisis de cada jugador de la Selección ante Corea:

Esteban Alvarado (9)

El mejor jugador de Costra Rica. No se equivocó, dio seguridad y mantuvo al equipo a flote con tres tapadas clave.

Bryan Oviedo (6)

En defensa le costó, le filtraron balones y no le faltó ayuda del volante. Intentó atacar y asociarse en el segundo tiempo.

Óscar Duarte (7)

Se empleó a fondo en el juego aéreo, hizo cierres por el centro y dominó esta zona. Le faltó ayudar más a Gamboa.

Francisco Calvo (7)

Bien arriba y en la cooperación con Duarte. Fue el central que más intentó participar en la creación desde atrás.

Cristian Gamboa (4)

Tuvo serios problemas para controlar el pase a las espaldas por la velocidad del rival, mal sin balón. En ataque muy precipitado.

David Guzmán (6)

Se esforzó. Debía armar desde atrás y se metió entre los centrales, pero debilitó el medio. Le costó la creación y al ser presionado.

Allan Cruz (6)

Su juego no fue vistoso, se dedicó más a marcar. Le faltó más participación en la fase de ataque y pisar el área rival.

Jimmy Marín (6)

El más activo de los volantes ofensivos, pero estuvo aislado. Intentó recibir y combinar, aunque no encaró ni enfrentó.

Daniel Colindres (5)

Inició activo, pero luego se aisló en el costado, perdió los pocos duelos que buscó y no colaboró tanto en la marca.

Elías Aguilar (5)

No generó fútbol y tampoco desequilibró como segundo delantero o como 10. No entendió que debía bajar a recibir balones.

Mayron George (5)

Su gran problema fue que no le crearon fútbol, quedó muy aislado y pese a que no se escondió, no lo acuerparon bien.

Rándal Leal por Aguilar, al 56′ (5)

Aportó muy poco, le falta ritmo de competencia y no tuvo ese peso como para sostener el balón y que conectaran con él.

Rodney Wallace por Colindres, al 68′ (5)

Es un jugador muy plano y lineal. Como volante debe generarse sus espacios para recibir y producir, algo que le costó.

David Ramírez por George, al 69′ (6)

Ingresó bien, es un delantero que sabe crearse sus espacios y por el centro dio cierta presencia. Sabe desmarcarse bien.

Wílmer Azofeifa por Guzmán, al 81′ (−)

Entró muy tarde al partido y su participación fue reducida. Prácticamente que solo pudo dar dos pases y cometió dos faltas.

Jonathan Moya por Marín, al 85′ (−)

Le dieron muy pocos minutos como marcar diferencia y mostrar su capacidad en ofensiva. Casi no tocó balón.

Infografía Nación.