Cuando se juega al límite y las esperanzas de ganar parecen escasas, es cuando más valor adquiere Marvin Angulo, a veces criticado y otras aplaudido, pero siempre influyente.
Es tan necesario el volante en el libreto morado que tenerlo en la cancha es una garantía de peligro. No siempre asume un rol protagónico con el balón. A veces sus actuaciones son tan discretas que pasa desapercibido, pero es justo el desenlace final, la última jugada, la que le da valor a su juego.
Saprissa igualaba a uno ante Guadalupe en tiempo de reposición, después de jugar desde el primer tiempo con un futbolista menos, cuando el volante lanzó un ‘centro-disparo’ al área que se acabó colando en la red.
Con un margen de respuesta casi nulo y el agotamiento al máximo, apareció el trazo fino del mediocampista para salvar a la ‘S’, después de un turbulento vuelo, que se tambaleó más de la cuenta con la expulsión de Julio Cascante apenas a los 21 minutos.
Tan común es que Cascante cometa un error como que Angulo aparezca en el momento clave. Con nueve anotaciones es el goleador morado, muy lejos de Jerry Bengtson, quien, al menos, debería mostrar un desempeño que le permita acercarse a esa cifra, pero no lo hace.
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Angulo también suma seis asistencias. Entre goles y pases gol, ha participado en 15 de los tantos de Saprissa en esta campaña y, lo irónico, es que esta no ha sido su mejor temporada.
Ayer, su centro se coló entre las redes de Luis Torres, que solo unos minutos antes había hecho una parada magistral, al desviar un disparo de cabeza de Joseph Mora que traía el sello de gol.
Aún cuando jugó la mayoría del partido con un hombre menos, el duelo se tornó parejo, con Guadalupe apostando a la apertura por los costados y la rotación del balón en la medular.
Saprissa, en cambio, se vio en la obligación de retroceder su engranaje para plantar un esquema sólido, que limitara al máximo la línea de pase del rival y le permitiera salir rápido al frente.
El sacrificio sobró dentro de la propuesta morada, de más exigencia y menos vistosidad, pero al fin efectiva, ante la necesidad de sacar tres puntos de visita con un hombre menos.
La expulsión de Cascante, algo drástica si se quiere, obligó a Watson a sacar de la cancha a Luis Stewart Pérez para introducir a Jeikel Medina y recobrar el equilibrio en el mediocampo.
Con 10 en la cancha, la ‘S’ consiguió abrir el marcador, obra de Mariano Torres desde el punto de penal, en el 42′.
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Este gol le bastó a los morados para salir al intermedio con la ventaja. En el segundo periodo, Guadalupe adelantó las líneas en busca del empate. Después de insistir en el tránsito de la pelota, Josué Rodríguez lanzó un buen centro al área y le colocó el balón en la cabeza a Mauricio Montero para equiparar el duelo.
El ida y vuelta fue la esencia del cierre, con un Guadalupe insistente y un Saprissa consciente de que con espacios podía ser letal en algún momento.
En la agonía, fue la figura de Angulo la que resolvió el problema morado. Otra vez.
Guadalupe: L. Torres, S. Garita (K. Medina, al 45'), E. Marín, J. Prendas, J. Rodríguez, A. Duarte (K. Vega, al 70'), M. Marín, M. Montero, F. Ramírez (C. Martínez, al 45'), A. Magaña, D. Quirós. D. T.: Antonio Abassolo
Saprissa: K. Briceño, J. Cascante, J. Mora, J. Smith, Y. Salinas, M. Angulo, A. Leite, L. Pérez (J. Medina, al 30'), M. Torres, J. Bengtson (J. Moya, al 62') y D. Ramírez (H. Mora, al 53'). D. T.: Carlos Watson