La novela que desató la filtración de un chat de árbitros el pasado 8 de febrero, en el que se hablaba de aplicar mano dura con el técnico morado Jeaustin Campos, suma otro capítulo más y parece que el final no se asoma.
Randall Poveda, presidente de la Comisión de Arbitraje, le contestó este martes al Deportivo Saprissa sobre el tema y descartó cualquier posibilidad de castigar a los árbitros protagonistas de la conversación de WhatsApp hecha pública por el periodista independiente Kevin Rivera.
En una carta enviada por Poveda al gerente general del cuadro morado, Gustavo Chichilla, la cabeza del arbitraje también deja claro que no escogerán a los réferis de los partidos según el gusto de los equipos.
Esta aclaración obedece a que el Saprissa pretendía que no se le nombrará a ninguno de los árbitros que comentaron en el chat de Whatsapp sobre lo permitir más lo que consideraban irrespeto de Jeaustin Campos.
“No vamos a condicionar árbitros para ningún tipo de partidos, esto iría en contra del juego limpio”, zanjó Poveda. Además, le recordó a la dirigencia del equipo morado que “el reglamento de la comisión de arbitraje de la FIFA es claro en su artículo uno”.
”La designación de árbitros es una parte fundamental del desarrollo del arbitraje y deberá ser gestionado en colaboración con la comisión de árbitros y el departamento de arbitraje de la federación miembro correspondiente. Ningún club, liga u órgano de la federación miembro podrá interferir en el proceso de la designación de árbitros”, recordó el presidente de la Comisión de Arbitraje de la Fedefútbol por medio de una carta enviada este martes 7 de marzo al gerente general morado, Gustavo Chinchilla, de la cual La Nación tiene una copia.
La ley por sus manos
En su chat, los silbateros no parecían dispuestos a tolerar más declaraciones como las brindadas por el técnico morado después del clásico: los tildó de soberbios, señaló que “no están a la altura” y “por eso no van a Mundiales”, para cerrar con “son un desastre” a nivel internacional”.
Una jornada antes, tras su visita al Ebal Rodríguez, en Guápiles, el timonel morado había tildado de “ladrón” al central Andrés Chinchilla.
En las imágenes de WhatsApp divulgadas se aprecian comentarios de árbitros como Octavio Jara, Hugo Cruz, Benjamín Pineda, Pedro Navarro, entre otros. Es decir, la plana mayor del arbitraje nacional.
“Yo les pregunto, qué están esperando para tomar decisiones. Eso es todo lo que ustedes tienen que leer para ver si acaso hay un cambio cuando le dirijan a ese señor (Campos)”, comenta uno de los réferis.
Otro escribió: “No están hablando de Juan Gabriel, está hablando del gremio y está en nuestras manos tomar decisiones”.
El mensaje alude a Juan Gabriel Calderón, quien dirigió el clásico en el Ricardo Saprissa, después del cual Jeaustin Campos arremetió sin contemplaciones contra el desempeño de los réferis.
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No se encontraron anomalías
Ante lo comentado por los árbitros en el chat, el presidente del Saprissa, Juan Carlos Rojas, se dejó ver alarmado y utilizó su perfil en Twitter, para hacer ver que el “tema era preocupante y que le deja serias dudas”. Saprissa solicitó castigos ejemplares para los árbitros.También pidió una reunión con el presidente la Fedefútbol, Rodolfo Villalobos, y la presidenta de Unafut, Vicky Ross. Al tiempo, hizo llegar su consternación a la Comisión de Arbitraje.
“(...) Quedamos totalmente perplejos e indignados ante la intención expresada por el grupo de árbitros, para perjudicarnos adrede y con absoluto dolo, según se lee en dichos mensajes”, expresaron los tibaseños en la carta dirigida a la Comisión de Arbitraje.
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Este martes, Randall Poveda aclaró en el documento de dos páginas que “no se encontraron anomalías en los pantallazos del chat privado de los árbitros”. Y, además, indica la imposibilidad de analizar más allá de lo que se filtró públicamente: “No tenemos una investidura legal para insertarnos en la privacidad de la comunicación de los árbitros”.
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“Una vez analizadas (las conversaciones) no encontramos razones de peso para sancionar a ninguno de los árbitros. (...) Las palabras que se mencionan no muestran ningún plan, ni estrategia para perjudicar a ningún equipo y a ningún jugador”, explica Poveda.
La respuesta de la Comisión de Arbitraje se da un día antes de que el Comité Ejecutivo de la Fedefútbol se reúna para discutir soluciones para esta novela que suma berrinches en redes sociales por parte de dirigentes, denuncias y acusaciones entre los mismos árbitros.