Presidente de La U denuncia que Herediano manipuló el campeonato con su llegada a Grecia

Juan Carlos Garita espera que la Fedefútbol intervenga. Señala que evidentemente no era solo de un “convenio” el que llevó a Herediano a quitarle jugadores a su equipo y levantar a Grecia en lo deportivo, económico y administrativo

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Aquel sábado 19 de octubre, Cristian González y Jafet Soto se reunían en la oficina del notario de Herediano para sellar la venta de acciones de Fuerza Griega, mientras el campeonato nacional vivía una batalla feroz entre La U y Grecia por abandonar el sótano de la tabla.

Al Día siguiente, el cuadro universitario igualaría 1 a 1 con Pérez Zeledón en Santa Bárbara, su sede provisional, y esperó en unos cuantos minutos para animarse con la noticia venida desde Grecia: el cuadro alajuelense había caído como local, 1 a 0, ante Cartaginés. Al fin se había dado la cacería en la tabla de posiciones, igualados con 17 puntos.

Los universitarios ni siquiera sospechaban lo que se venía, a partir de la alianza entre Herediano y Grecia, un convenio sobre el que “hoy podemos evidemente decir que no fue tal”, según Juan Carlos Garita, presidente de La U Universitarios, consultado sobre las recientes publicaciones de La Nación.

En ellas se revela con testimonios y documentos como cheques, comprobantes de transferencia y protocolos legales varios secretos de nuestro fútbol: el gerente del Herediano, Jafet Soto, le compró a Cristian González acciones de Fuerza Griega. El vicepresidente de Fuerza Herediana, Orlando Moreira, transfirió dineros a González por aquella compra. Lajaf, la empresa familiar del gerente florense, emitió cheques con el mismo fin.

La Nación quiso conocer la versión de Herediano y Moreira aseguró que no hablaría al respecto, que Jafet Soto ya había dado su versión semanas atrás y que recientemente amplió en CRHoy. En ese medio, Soto aseguró que pagó por las acciones para un amigo suyo, el argentino-mexicano José Fernández, padrino de sus hijos, en condición de préstamo. En tanto, en declaraciones al periodista Josué Quesada, en el espacio de facebook Teléfono Rojo, le dijo que Moreira le prestó dinero a él para completar los pagos.

“Si el Comité de Licencias tenías dudas, en vista de las declaraciones y las evidencias ya no debería haber dudas”, considera Juan Carlos Garita, presidente de La U.

Campeonato alterado. Al 19 de octubre le sucederían cambios trascendentales: el artillero de La U, Anthony Contreras, préstamo de Herediano en el equipo celeste, pasaría a su archirrival de turno, el equipo griego. El cuadro celeste perdería “seis o siete jugadores” que le había prestado el Team, según Garita. A Grecia llegarían al menos once fichas, con tintes rojiamarillos, procedentes de Limón, Guadalupe, La U y el mismo club florense. Aldo Magaña, anotador de goles claves en la consecución del cetro florense, también se vestiría de griego.

El cambio más significativo, sin embargo, se reflejó en la tabla de posiciones. Aquel Grecia que tenía encima la sombra del descenso pasó del 32% de rendimiento en el Apertura al 42% en el Clausura (considerando solo los partidos jugados). Ni siquiera cayó al sótano con la pérdida de tres juegos en la mesa, dada la suspensión de la licencia. Aún con ese bache legal, conserva la ventaja de tres con que terminó el pasado torneo.

Grecia pasó a ser un equipo capaz de plantársele a cualquiera, como demostró ante el campeón, el mismo Herediano, con quien no perdió en ninguno de los dos duelos (3 a 3 y 1 a 1). De igual forma, demostró el cambio con dos victorias sobre La U (1 a 0) y (4 a 0).

“Desmantelaron mi equipo y mi reforzaron a mi rival directo”, se queja Garita.

El que paga la música. Si bien Garita entiende que los jugadores son de Herediano, advierte que el préstamo se había negociado hasta el final del presente torneo. Cuando se lo reclamó a Soto, este fue claro: “Lo siento”, le dijo Jafet, según narra Garita. El gerente florense le explicó que ese había sido el acuerdo con el anterior gerente de La U, Olman Vega: la posibilidad de recuperar los jugadores en cualquier momento, dado que el cuadro florense les paga el salario.

En la disputa, al final quien cedió fue Juan Carlos Garita, en lugar de pelear en otras instancias. “No fue tan fácil como ‘démelos’ y ‘tómelos’. Hubo una discusión, porque yo iba a ser afectado”. Entendió, según cuenta, en acuerdo con el actual gerente universitario, Javier Delgado, que dejarse los jugadores contra voluntad sería contraproducente, sobre todo si les negaban la oportunidad de jugar en el Team, como le dijo Jafet Soto que sucedería.

“Él no me dijo que iban para Grecia. Me dijo que a Anthony Contreras lo necesitaba en Heredia porque se iba Francisco (Rodríguez). Entonces los jugadores no iban a estar conformes conmigo”.

Siendo Herediano quien pagaba los salarios era mejor no oponerse, según interpretó Garita de las palabras de Jafet Soto: “Me dijo: ‘Además yo conozco a los jugadores cómo son en lo económico’. Yo tengo los audios de eso”.

El presidente de La U espera que la Federación intervenga y tome decisiones, porque “se cruzó la línea que permite FIFA, que me permite el fair play”, al punto de influir en los resultados del campeonato nacional, con La U como posible afectado. “Totalmente”.

A Garita se le recordó que así como Herediano hoy tiene un “convenio de cooperación” con Grecia, en el pasado reciente lo tuvo con La U, cuando la llegada de jugadores y el técnico Minor Diaz los salvó del descenso. Aseguró, sin embargo, que en ese caso fue solo el préstamo de jugadores y el técnico, pero “no un convenio” con los alcances del actual entre Herediano y Grecia, que incluye lo deportivo, lo económico y lo administrativo y hasta la compra de acciones por parte de Jafet Soto.

“Está claro que eso no es un convenio. ¿Qué más pruebas hacen falta?".

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