¿Por qué San Carlos debe afrontar el duelo ante Saprissa como un ‘ahora o nunca’?

Aunque los norteños no consigan su primera estrella de campeón este miércoles, tienen la posibilidad de jugar una gran final ante los morados. Sin embargo, es riesgoso ante un Saprissa que sabe arrebatar títulos.

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El partido más importante en la historia de la Asociación Deportiva San Carlos se juega este miércoles a las 8 p. m. en el Estadio Carlos Ugalde Álvarez, donde los Toros del Norte pueden gritar que son campeones por primera vez.

No obstante, San Carlos no debería dejar ir esta oportunidad de hacerse con el trofeo, pues Saprissa es un especialista en arrebatarle el título a los equipos que lo dejan con vida.

Los morados tienen una historia que los respalda y quieren ponerla a jugar en este torneo, pero para eso necesitan mantenerse con vida y forzar a una Gran Final.

De sus 34 campeonatos, Saprissa ha arrebatado nueve en el cierre del torneo. En todas esas ocasiones vino desde atrás, sin haber ganado la primera fase, y terminó llevándose el trofeo.

“Esto ha pasado, primero, por los buenos jugadores. La historia que los respalda. Ellos siempre han sacado resultados importantes, sabemos de la presión en la que estamos, pero estamos muy tranquilos y confiados en que hemos trabajado bien y podemos confiar en remontar cualquier cosa”, detalló Wálter Centeno, técnico del Saprissa.

Los morados experimentaron esta situación por primera vez en el campeonato de 1973, cuando terminaron la primera fase del torneo en el cuarto lugar, ganaron la segunda y terminaron obteniendo el cetro en una cuadrangular por encima de Barrio México, Cartaginés y Ramonense.

Para 1975, los morados se aprovecharon del formato del torneo, que les facilitó quedar segundos en la primera fase, cuartos en la segunda fase, para acceder a una cuadrangular final y salir campeón.

En 1976 y 1977, los cetros morados se gestaron desde atrás, sin dominio en la primera etapa del torneo, pero con triunfo en las pentagonales finales, en las que sus rivales lo dejaron con vida en varias oportunidades.

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Esto es algo que en San Carlos lo tienen muy claro, pues extender el certamen a dos partidos más es un riesgo muy grande para sus aspiraciones.

“Es un momento importante, lógicamente, no solo para mí, sino para el club. Podríamos estar ante algo histórico, entonces estamos muy tranquilos, sabiendo que no hemos ganado absolutamente nada, que tenemos un gran rival al frente y que nos va a dar la pelea. Es un rival que nunca se da por vencido y estamos empatados”, expresó Luis Marín, técnico norteño.

Saprissa también realizó este tipo de gestas en los 90, cuando para la campaña 93-94 terminó en la tercera posición de la tabla acumulada, pero eso no le impidió ganarle la final de la segunda fase a la Liga y después volver a derrotarlos en una definitiva serie final, gracias a figuras como Hernán Medford y Óscar Ramírez.

Desde la inclusión de los torneos cortos en el 2007, los tibaseños han experimentado cuatro veces la sensación de arrebatarle el campeonato a sus adversarios más enconados viniendo sin el cartel de favorito.

Saprissa lo hizo en el Verano 2008, Invierno 2014 y en el Invierno 2015, cuando pese a no cerrar como el mejor equipo de la fase regular sacó su estirpe en las semifinales y finales para sumar más estrellas a su constelación privada.

La más reciente de estas hazañas moradas se escribió en el Clausura 2018, cuando finalizó segundo en las 22 jornadas, ganó la cuadrangular, con lo que forzó a una final ante Herediano, a quien derrotó desde el punto de penal para su título 34.

Saprissa necesita un gol este miércoles para mantenerse con vida en la lucha por la final, pero un solo gol le puede bastar para tener vivo el sueño de la 35.