David Diach se retiró hace dos años. El espigado delantero que vistió la camisa de Alajuelense, Herediano, Cartaginés y Brujas, entre otros, tiene una jugada que en la calle los saprissistas no le perdonan, cada vez que puede se la recuerdan, porque según cuenta es de las anotaciones más dolorosas para ellos.
Cuando Diach avanza por las calles escucha comentarios de aquel bombazo, ese disparo que un 31 de octubre de 2004 marcó al saprissismo porque con un izquierdazo rompió la red del marco morado, en el propio Ricardo Saprissa.
Ahora, 15 años después de aquel episodio, el exatacante sonríe al recordar la diana, también acepta que jamás se imaginó que ese gol quedaría en la retina de los aficionados morados después de tanto tiempo.
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“Es que golazo fue verdad... (risas). Le voy a ser sincero, en ese momento Saprissa era el mejor equipo del país y hacerle ese bombazo la verdad que fue algo muy bonito. Creo que ellos estaban cerca de amarrar el boleto al Mundial de Clubes, entonces vienen de golear a Herediano y empezaron a hablar de la noche de brujas, porque era contra Brujas el 31 de octubre; al final el día de brujas les salió a ellos”, expresó.
Diach corrió a la esquina y empezó a saltar para celebrar, sin darse cuenta la torta que había cometido. Cuando estuvo cerca de los zagueros morados escuchó que reclamaban porque no había sido gol.
En eso, Kervin Lacey se acercó al arco morado y sacó su cara por el hueco que se hizo en la red.
“Yo salgo corriendo y agarrándome con todo el mundo porque para los aficionados fue un golpe duro, cuando salgo corriendo sé que es gol. Escucho a Medford, José Francisco Porras y Wálter Centeno decir que no era gol, pero aparece Kervin Lacey y se asoma por el marco y ya no había nada que reclamar”, revivió con sus palabras entre risas.
David mencionó que los morados siempre le alaban el gol; también aceptan que es uno de los capítulos dolorosos de su historia por la derrota 3 a 1.
El exdeportista ahora milita en el cuerpo técnico del cuadro del Rosario de Naranjo de la Liga de Ascenso, ya que tiene una gran amistad con los administradores del equipo.
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"Lo que pasa es que la edad le cobra a uno, tuve la suerte de terminar mi carrera con 42 años, me siento entero, me ha interesado la parte técnica. El presidente del Rosario es una persona muy cercana y ahora está Rodolfo Rodríguez, Pablo Izaguirre de entrenadores, entonces les estoy ayudando", mencionó.
Ahora el goleador prefiere las canchas de baloncesto para distraerse en vez de las de fútbol.
“Tengo como seis meses de no jugar, siempre le meto al baloncesto me gusta ser poste. El dueño de Rosario tenía el mejor equipo de occidente en canchas abiertas y ahí estuve con ellos. Imagínese que nadie nos ganaba, sumamos 62 partidos invictos”, recordó.
El exdeportista añadió que su deseo es terminar de consolidarse como timonel para tomar un proyecto en la máxima categoría. Sobre el estilo de juego que le gusta, agregó que como buen goleador el fútbol ofensivo es lo suyo.
“Me gusta la elaboración, el toque - toque, llegar con explosividad. Los delanteros tienen que ser potentes, incómodos, usted sabe como era yo”, concluyó.