Desde la cuna hasta la tumba

El rechazo del uso de cera en productos de exportación costarricenses puede ser el primer aviso de la Unión Europea

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Con respecto a la parafina usada para proteger productos costarricenses de la contaminación y el deterioro, causa de problemas para quienes exportan a diferentes países de la Unión Europea, el país debe tener presente que en el 2007 el bloque aprobó la normativa Reach (siglas en inglés de registro, evaluación y restricción de sustancias químicas) y esta entró en vigor en el 2018.

Se basa en no producir, no usar, no importar y no exportar productos dañinos para los seres vivos y el medioambiente; y en la responsabilidad de los fabricantes desde la cuna hasta la tumba.

Todo producto que se use o consuma en la UE debe estar registrado en una gran base de datos de la Agencia Europea de Productos Químicos, con sede en Helsinki, Finlandia, la cual los evalúa, aprueba la solicitud o los restringe.

Costa Rica tiene mucho de la normativa Reach en los registros de productos del Ministerio de Salud y el Instituto de Normas Técnicas de Costa Rica (Inteco), entre cuyas funciones está dotar al país de las normas nacionales y la disponibilidad de las internacionales. El Ente Costarricense de Acreditación (ECA) vela por la evaluación de conformidad con los estándares internacionales.

Esta estructura garantiza al país una buena base técnica para asegurar que nuestros productos sean aceptados en mercados foráneos.

Protección de la vida y el medioambiente. En la UE, el público se vuelve cada día más consciente del espíritu de la Reach. Es frecuente que en los supermercados se indique que lo que venden responde a las buenas prácticas de manufactura y el respeto a los derechos humanos y al medioambiente; por eso, han aparecido reportajes sobre cómo se cultiva en nuestros bananales y piñales. Con respecto a la parafina, es posible que no esté registrada en la base de datos de la ECHA (siglas en inglés de la Agencia Europea de Sustancias y Mezclas Químicas).

Consideremos el principio desde la cuna hasta la tumba. La Reach cuida algo muy relevante y es que el fabricante de productos químicos o mezcla de sustancias debe velar por el uso adecuado de los componentes en toda la cadena de valor y por las medidas de seguridad e higiene ocupacional, principalmente, cuando se trate de sustancias tóxicas o peligrosas. La ficha técnica del producto señala las normas de seguridad requeridas.

En Costa Rica ha habido reclamos por sobrepasar los límites de sustancias residuales controladas en algunos alimentos. Cuando se hace el análisis de las causas, en la Reach dice que el fabricante o proveedor de la sustancia controlada tiene tanta responsabilidad como el productor o fabricante del producto rechazado.

Más allá del negocio. Cuando supera los límites, se debe a que los controles fallaron. No es cuestión de vender, recoger el dinero y olvidarse del asunto, la normativa de la UE sienta responsabilidades hasta que el alimento haya sido consumido por el cliente.

La Reach obliga a una mayor colaboración entre proveedores y usuarios de sustancias químicas a fin de que todos ganen. ¿Qué conocimiento tendrán nuestros pequeños exportadores y las personas que los asesoran en relación con esta materia?

Espero que estemos ante un caso aislado y no del primer aviso de mayores problemas para el futuro de nuestras exportaciones.

jriverap05@yahoo.es

El autor es químico industrial.