El ministro de Hacienda afirmó ante la comisión de infraestructura de la Asamblea Legislativa: “Hay buenas ideas, pero malos proyectos”. Su tajante recomendación: evitar nuevo financiamiento a las entidades que no ejecutan en los tiempos establecidos y evitar horrores como el pago de $35 millones en multas por baja o nula ejecución.
Acosta acierta cuando señala que se invierte poco en preinversión, sin coordinación interinstitucional, que el régimen de expropiaciones no funciona y somos incapaces en planificar y ejecutar. Sin embargo, esa seria posición no coincide con las decisiones del gobierno. Ejemplos sobran, como la ampliación del plazo a la constructora de la ruta 32, la consideración de la ampliación de la concesión a Caldera y, quizás la mayor de las incógnitas, qué pasará con laruta 1, sobre la que hay un silencio total.
Falla también el MOPT en el área de transporte en la asignación de la revisión técnica a Dekra, la segunda en puntuación, muy por debajo de la primera, lo que podrá tener consecuencias pecuniarias para el país, y asombra la defensa de la prórroga de la vida útil de los buses, de 15 a 20 años, acertadamente frenada por la Asamblea Legislativa, pues pone en riesgo la seguridad de los usuarios y desconoce las necesidades de las personas con discapacidad.
Un ministro encargado de las carreteras que dice no poder garantizar la seguridad en estas y la traslada a los usuarios es el mismo que usó dinero del Conavi para pagar una multa a la concesionaria del aeropuerto, argumentando no contar con contratos de mantenimiento vial, que por cierto este año “desengavetó” el director del Conavi.
Es la misma cartera que critica un supuesto aumento del cobro de la licencia de parte del BCR, ¿otro intento de desacreditarlo?, desmentido por la institución porque los precios los fija el ministerio a su cargo.
En lo positivo, se inició el túnel de La Galera, el reforzamiento del puente del Saprissa y varios contratos de mantenimiento vial rescatados. En lo urgente, no se ha definido qué pasará con el avance y seguridad en dos vitales arterias nacionales (la 1 y la 27), qué medidas se tomarán para no continuar con la cultura “de las buenas ideas y malos proyectos”, pero sobre todo los planes concretos para frenar la corrupción.
nmarin@alvarezymarin.com
La autora es politóloga.