Relaciones entre personas con discapacidad

Sexualidad con prejuicio

Los personajes de estas tres historias tienen en común que conviven con una discapacidad y, en los tres casos coinciden en que les afecta la creencia popular que rodea a esta población: el sexo no es una actividad para ellos.

  • Jose Pablo Román
    PERIODISTA
  • Daniel padece esquizofrenia y, según su mamá, tiene episodios en los que se masturba compulsivamente. Esteban y Camila tienen Síndrome de Down, dos años de noviazgo, y no se acostumbran a que la gente los siga viendo como ‘hermanitos’. Eunice Murillo tiene una lesión medular y disfruta con su esposo en la intimidad, pero fue hasta el 2016 que tuvo acceso a un consultorio ginecológico adaptado a sus necesidades físicas.

    Aunque al referirnos a personas con discapacidad (PcD), hablamos de una amplia diversidad de personas y condiciones, los personajes de estas tres historias coinciden en que les afecta la creencia popular que rodea a esta población: el sexo no es una actividad para ellos.

    “Para la gente somos angelitos. Pero lo cierto es que tenemos pensamientos y deseos sexuales como cualquier otra persona. Yo te puedo decir que tengo amigos con o sin discapacidad y nos sentamos a hablar de sexualidad naturalmente desde en un ambiente jocoso hasta en un ambiente de respeto y de dudas”, comentó Karla Ballesteros, quien padece atrofia muscular espinal, es psicóloga y directora de la Asociación de Autonomía personal y discapacidad (DITSÚ).

    El desarrollo pleno de la sexualidad es un derecho universal, inherente y esencial para el bienestar individual, interpersonal y social de todos los seres humanos, en el que se busca la equidad sexual libre de todo tipo de discriminación entre las personas, según consta en la Declaración de los derechos sexuales, aprobada por la Asamblea de la Asociación Mundial de Sexología (WAS).

    Negar la sexualidad de las PcD no se refiere únicamente a limitar el disfrute de las relaciones coitales. Las consecuencias de creer que las personas con discapacidad no mantienen estos vínculos las afecta de diversas maneras que pueden ir desde el desconocimiento sobre su sexualidad y la dificultad de relacionarse afectivamente con otra persona, hasta un acceso deficiente a los servicios de salud sexuales y reproductivos, lo cual se puede convertir en una amenaza para su vida.

    Vea las historias:

    Emanuel Hernández hace rap y al igual que su amigo Daniel tiene una discapacidad psicosocial. Cuando se le preguntó sobre su sexualidad se mostró reservado y puso a sonar “Valemos”, una grabación casera en forma de respuesta, y que posteriormente produjo Punto y Aparte para este reportaje.

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    Director de carrera: Lic. Erick Valdelomar M.

    Un servicio brindado por la Universidad Santa Paula como parte de este reportaje.