Una reforma al Reglamento para la Prestación de Servicios del AyA amplió a tres años la vigencia de las cartas de disponibilidad de agua, las cuales se otorgan a desarrolladores de proyectos en áreas donde la entidad tenga programadas futuras obras para dotar de suministro.
Antes del cambio, el Instituto Costarricense de Acueductos y Alcantarillados (AyA) otorgaba constancias de disponibilidad con una validez máxima de 12 meses. En el proceso de solicitud, la entidad evaluaba en ese año la capacidad de suministro y, si era factible, concedía la constancia. Esto permitía a los interesados avanzar en otras gestiones, como la obtención de planos y permisos.
La extensión a tres años brinda a los desarrolladores más tiempo para llevar a cabo sus proyectos y, a la vez, aumenta las posibilidades de que AyA realice las obras necesarias para asegurar el suministro de agua. Esta iniciativa pretende agilizar el proceso y fomentar el desarrollo inmobiliario y de construcción.
Según datos proporcionados por la entidad, en el 2023 se registraron 23.272 solicitudes de constancias de disponibilidad de agua.
De ese total, el 22% fueron rechazadas, principalmente debido a la falta de infraestructura hídrica en las zonas solicitadas, así como a la omisión de requisitos necesarios. Del total de solicitudes, el 17% correspondía a proyectos individuales de vivienda o comercios, mientras que el 5% estaba destinado a desarrollos inmobiliarios de múltiples propiedades.
En el ojo público
Un informe reciente de la Autoridad Reguladora de los Servicios Públicos (Aresep) reveló que en algunos cantones, el porcentaje de solicitudes para nuevas conexiones que son rechazadas alcanza hasta el 50%. Las razones más comunes incluyen falta de viabilidad del servicio, insuficiencia de capacidad hidráulica, incumplimientos de requisitos por parte de los usuarios y problemas ambientales.
En la Gran Área Metropolitana (GAM) también se señala como una de las causas el desperdicio de líquido, un factor no resuelto por el AyA a lo largo de los años.
En tanto, datos proporcionados por el Colegio Federado de Ingenieros y de Arquitectos (CFIA), la Cámara Costarricense de la Construcción y el Consejo de Desarrollo Inmobiliario indican que actualmente existen 2.561 proyectos constructivos en espera debido a la falta de disponibilidad del recurso. Estos proyectos representan una inversión estimada de $510 millones, según una encuesta realizada entre desarrolladores.