¿La obesidad se puede contagiar? Esto responde un médico

Solo el año pasado, la CCSS atendió cerca de 300.000 personas con complicaciones relacionadas con esta enfermedad

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Si los padres son obesos, hay una alta probabilidad de que sus hijos también lo sean. Este riesgo sobrepasa las posibilidades de herencia por causas genéticas, pues los hábitos alimenticios de una familia tienen un enorme peso a la hora de definir si la progenie desarrollará esta enfermedad.

El médico Luis Adolfo Calvo asegura que la obesidad se contagia por el entorno. Por ejemplo, afirma, las costumbres de cada país tienen su influencia y, sobre todo, las prácticas de alimentación dentro de los hogares. Calvo participa en el Congreso Médico Nacional, que se celebra esta semana en el Hotel Real InterContinental, en San José.

De ahí la importancia de que los niños se desarrollen en contextos familiares saludables, donde la actividad física y la alimentación balanceada sean el día a día.

“Igual pasa con las diferencias culturales. No es lo mismo vivir en Estados Unidos, donde abunda la llamada ‘comida chatarra’, que en Japón, donde las dietas son más ricas en alimentos bajos en grasas”, amplió Calvo.

La obesidad es una enfermedad definida así por la Organización Mundial de la Salud (OMS). Su presencia se determina con un indicador llamado índice de masa corporal, que resulta de dividir el peso de una persona entre su estatura en metros, elevada al cuadrado. Cuando el resultado es mayor a 30, la persona tiene obesidad.

Esta enfermedad es sistémica: daña venas, arterias, produce complicaciones pulmonares, y desencadena otros padecimientos crónicos y graves, como diabetes y presión alta.

Calvo afirma que la obesidad también “se contagia” por herencia, cuando se transmiten alteraciones epigenéticas, que son cambios en el ADN que hacen a unas personas más propensas a la obesidad que otras.

“Por ejemplo, si un hombre engendra a su hijo estando obeso, se pueden dar alteraciones epigenéticas en sus espermatozoides y hacer que su pequeño sea propenso a la obesidad y a todas las complicaciones que eso puede llevar”, dijo el médico.

La última Encuesta Nacional de Nutrición es del 2009. Evidenció que el 60% de los adultos nacionales tenían sobrepeso.

La investigación más reciente es el Estudio Lationamericano de Nutrición y Salud, del 2018, que arrojó que el 32,6% de los costarricenses entre 15 y 65 años pesa más de lo que debería y 30,6% era obeso. En ese entonces, Costa Rica fue el segundo país con mayores índices de las ocho naciones analizadas.

Ese estudio reveló que hay dos poblaciones que más sufren los embates del exceso de peso: las mujeres y las personas mayores de 35 años: el 37,6% de las mujeres presentó obesidad, contra el 23,5% de los hombres. En el grupo de 35 a 65 años, tres cuartas partes tenían sobrepeso.

Un análisis realizado por la Universidad Hispanoamericana (UH), publicado a inicios de octubre, dio a conocer que en el 2021 la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS) atendió a 297.552 pacientes con complicaciones de salud derivadas directamente de la obesidad.

Según la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), la obesidad le quitará a los ticos 3 años en esperanza de vida para el 2050.