Los cinco imputados en el juicio por supuesta trata de personas para extracción ilícita de órganos habrían orquestado un plan, con distribución de funciones y se habrían enriquecido con estas operaciones.
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Estas son las afirmaciones que hizo la fiscala Ileana Mora en el inicio del período de conclusiones, este lunes, en el juicio que se le sigue a cuatro médicos y un comerciante.
Para Mora, en ninguno de los casos analizados hubo donación de órganos.
"Aquí lo que hay es la inexistencia de la donación porque se pagó. (...) Los intermediarios fueron quienes se enriquecieron. Hasta se cobraba de más al receptor", manifestó Mora.
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El proceso, que entró en su etapa final, se inició el 11 de setiembre y finalizará el 30 de noviembre.
Está previsto que la Fiscalía exponga sus conclusiones entre este lunes y el martes.
Figuran como imputadas cinco personas; entre ellas, cuatro médicos. Francisco Mora Palma, quien fuera jefe de Nefrología del Hospital Calderón Guardia, es señalado por la Fiscalía como el presunto líder de una red con contactos internacionales.
En su disertación de esta mañana, Ileana Mora hizo un análisis de los tipos penales que justifican los delitos que se le atribuyen a los imputados. Entre ellos, peculado y lesiones graves.
La fiscala reiteró las funciones de Mora Palma en esta supuesta red. Entre ellas, dijo, este médico ubicaba los clientes extranjeros, captaba personas de escasos recursos como donantes, les ofrecía dinero a cambio del riñón y las hizo firmar declaraciones juradas para ocultar el pago.
"Las víctimas fueron utilizadas mediante intermediarios que se enriquecieron con las necesidades de dos: de personas con dinero que necesitaban un trasplante; y de personas vulnerables que necesitaban dinero. La realidad de estos 12 casos en los que se operaron personas a cambio de dinero no hubo visión humanitaria (de parte de los imputados). Se hizo a cambio de dinero", indicó la funcionaria.
Mora también reiteró que los médicos no pueden alegar desconocimiento de la ley –como lo han hecho aduciendo que no son abogados– pues están en la obligación de conocer regulaciones nacionales e internacionales sobre el tema trata, que prohíben pagos y protegen a las víctimas.
Enfatizó en la vulnerabilidad de las 14 víctimas que acuerpan la denuncia de la Fiscalía, y la total falta de información de las personas a quienes se les extrajo el riñón para trasplantárselo a extranjeros; principalmente de Israel y Grecia.
"Los riesgos de sus secuelas no fueron informados. No se trataba de decirles simplemente Cuídese, no haga loco, tome mucha agua”. Los riesgos que establece la ley quedaron patentes", manifestó la fiscala.
Múltiples amenazas
La funcionaria enfatizó en la total desprotección de las víctimas.
Entre los principales puntos señalados la mañana de este lunes por la fiscala Mora están los siguientes:
- El nefrólogo Francisco José Mora Palma habría sido el líder de la red a cargo de ubicar personas que dieran su riñón y receptores extranjeros. Sería el responsable de hacer los pagos al equipo médico.
- Los lugares donde se habrían cometido los hechos incluyen: el consultorio y laboratorios del Hospital Calderón Guardia; Clínica Bíblica, Hospital La Católica y pizzería Acrópolis.
- Los cirujanos urólogos y el vascular periférico habrían tenido conocimiento de la ilicitud de la extracción y que recibirían un pago por la cirugía.
- Los hechos que se debaten habrían ocurrido entre 2009 y 2013.
- Las 14 víctimas de estos supuestos hechos eran vistas como "simples repuestos".
- Las personas a quienes se les extrajo el riñón no recibieron toda la información sobre los riesgos de esta cirugía.
- Las víctimas de estos hechos hoy representan un costo para la seguridad social.
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Hasta el momento, solo tres de los cinco imputados han brindado declaración voluntaria: Francisco Mora Palma, Maximiliano Mauro Stamati y Fabián Fonseca.
Estos dos últimos, urólogos, manifestaron haber sido engañados por Mora y por las víctimas.
Mora Palma, quien voluntariamente declaró al inicio del debate, el 13 de setiembre, ha negado todos los cargos.
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En su momento, manifestó: “Yo no negocié, no transé, no vendí, no compré ningún riñón de ninguna persona. Yo no negocié, no transé, no compré ni vendí ningún derecho humano. Yo no obligué, no coaccioné, no engañé ni tomé ventaja de los que hoy se consideran ofendidos".
Este juicio es el primero en su tipo que se realiza en el país, donde las víctimas son consideradas objeto de trata de personas para la extracción ilícita de órganos.
La presentación de la Fiscalía finalizará este martes, con la solicitud de penas para los imputados.