Las dos dosis de protección de la vacuna contra la covid-19 ya fueron aplicadas a 160.263 personas en Costa Rica, mientras que otras 63.829 esperan que se cumplan los 21 días después de su primera inyección para así completar su esquema.
Datos de la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS) destacan que, a este lunes 29 de marzo, se habían colocado un total de 384.355 vacunas, para una tasa de vacunación nacional de 7,55 dosis por cada 100 habitantes. Al miércoles era de 6,74.
En cuanto a la distribución por sexo, 208.565 dosis se han colocado a mujeres y 175.790 a hombres. Esto se traduce en una tasa de aplicación de vacunación de 6,8 por cada 100 hombres y de 8,1 por cada 100 mujeres.
Si lo vemos por grupos, en el llamado Grupo 2, compuesto por personas de 58 años y más se han colocado 236.858 dosis de la vacuna. Más específicamente, 92.283 personas ya cuentan con la protección total en este grupo y 52.292 están a la espera de la segunda dosis.
Si se toman en cuenta por grupos de edad, la población con mayor cobertura de vacunación es la de 100 años y más, donde el esquema está completo en el 64,6% de las personas. Le sigue el grupo de 90 a 99 años con un 61,5% y el de 80 a 89 con un 52,9%.
No obstante, hubo otros datos que no fueron difundidos, como la cantidad de dosis que fueron despachadas esta semana a las diferentes áreas de salud.
El viernes, la CCSS anunció que en Semana Santa se aumentarían las dosis y casi 75.000 costarricenses serían vacunados. No obstante, no se informó de la cantidad de envíos realizados este lunes (día de la semana en la que por lo general se envían estos fármacos).
El viernes pasado se indicó que se distribuirán 12.498 viales (o frascos con el líquido de la vacuna, cada uno alcanza para seis dosis) que al final implicarán un total de 74.988 dosis.
La planificación inicial era de 7.529 viales que equivalen a 45.174 dosis. Esto significa que se aplicarán 29.500 dosis más de lo programado inicialmente.
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Las autoridades de salud señalaron este viernes un cambio en la estrategia de vacunación que permitiría abarcar a más personas en menos tiempo.
Para ello, algunas áreas de salud aumentaron su horario de lunes a miércoles y otras agendaron citas Jueves y Viernes Santos.
El cambio de estrategia supone cambios también en la forma de vacunar.
Anteriormente, el esquema se dividía en tres semanas en las que solo se colocaban primeras dosis, y luego de esto se hacían tres semanas de vacunación de segundas dosis.
De esta forma, se tenían tres semanas de reserva de dosis. Esto garantizó, por ejemplo, que cuando la compañía Pfizer frenó los envíos, cada persona que ya había tenido su primera inyección tuviera su segunda.
Con el cambio, ya solo se tendrá una semana de reserva.
Esto también implica riesgos, pero ante una situación de aumento de casos, era necesario tomarlos.
“Se asume un riesgo ante posibles retrasos y suspensiones en las entregas de vacunas y, como saben, hay una enorme presión de los países, sobre todo, los más desarrollados para agilizar su vacunación”, recalcó Daniel Salas, ministro de Salud.
“Entonces, si hay una pausa o retraso, hay riesgo, pero ya estamos frente a una ola que da sus amagos de inicio y por ello debemos acelerar el grupo 2 y el faltante del grupo 1″, añadió.
En las últimas tres semanas se ha visto un repunte en los casos de covid-19 y también se presenta un aumento en la hospitalización desde mediados de marzo. La mañana de este martes se indicó que la CCSS cuenta con 35 espacios en unidades de cuidado intensivo (UCI), hay una saturación del 82%, pues están ocupadas 160 camas de las 195 disponibles para atender la enfermedad.
Para este martes se tiene prevista la llegada de más dosis de vacunas por parte de la empresa Pfizer.