Carlos Alvarado toma con cautela propuesta de Figueres sobre impuesto a casas de lujo

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El presidente de la República, Carlos Alvarado, tomó con cautela la contrapropuesta presentada por José María Figueres, candidato de Liberación Nacional (PLN), sobre la reforma al impuesto de las casas de lujo.

Luego de reunirse con los diputados electos de su partido, este miércoles, el candidato liberacionista manifestó que apoyaría la propuesta siempre y cuando se cobre el impuesto a las casas valoradas a partir de los ¢320 millones, en vez de los ¢137 millones actuales o de los ¢175 millones que propone el gobierno.

De acuerdo con Carlos Alvarado, el Ministerio de Hacienda tendría que revisar los parámetros para determinar si de esa manera se pueden recaudar los ingresos comprometidos ante el Fondo Monetario Internacional (FMI).

“Es algo que el Ministerio de Hacienda tiene que analizar con detenimiento, tanto la propuesta técnica como la viabilidad política, con dosis de realismo (...). Creo que hay que verlo bajo esa luz y bajo las metas de cumplir con los acuerdos del Fondo Monetario”, afirmó el mandatario.

La propuesta de José María Figueres exoneraría del impuesto a las viviendas valoradas entre ¢137 millones y ¢320 millones, que actualmente pagan dicho tributo.

El planteamiento del político verdiblanco implicaría que dejen de pagar este tributo cerca de dos terceras partes de los contribuyentes actuales.

Por el contrario, la última propuesta del Poder Ejecutivo consiste en gravar las casas valoradas a partir de los ¢175 millones, con una tasa progresiva del 0,5%, que aumente conforme más alto sea el valor del inmueble. Con esa iniciativa, quedarían libres del pago las casas entre ¢137 millones y ¢175 millones, que actualmente sí están gravadas.

Actualmente, la tarifa oscila entre el 0,25% y el 0,55% anual del valor de la propiedad según el valor del bien. Figueres aboga por una tasa igualmente progresiva, pero no detalló los porcentajes.

“Hoy el impuesto a las casas de lujo ya existe, ese no lo está creando el Gobierno. El Gobierno está proponiendo una serie de cambios para cobrarlo objetivamente, y su última propuesta está en ¢175 millones y, bueno, existe esta propuesta (la de Figueres).

“Lo único que marcaría esta discusión es que estamos hablando de un segmento de población que es la que más ingresos tiene; aquí no estamos hablando de personas en vulnerabilidad, ni en personas en pobreza extrema, tampoco estamos hablando de la clase media, ni siquiera de la clase media alta.

“Estamos hablando de un segmento muy reducido de las personas que son las que tienen más ingresos del país, a las cuales se les busca una contribución voluntaria”, afirmó Alvarado.

Durante su conferencia de prensa de este miércoles, José María Figueres resaltó la importancia de cumplir con el acuerdo del FMI, del cual es parte la reforma al impuesto a las casas de lujo, aunque al mismo tiempo dijo que se oponía a aprobar nuevos tributos.

“Con respecto a casas de lujo, lo que no queremos son impuestos sobre casas que afecten a la clase media de este país y yo, personalmente, he dicho que estoy de acuerdo con un impuesto a casas de lujo que sea mucho más progresivo a partir de una valoración de $500.000 (unos ¢320 millones) para que, entonces, no se graven las casas de clase media, incluyendo clase media alta, pero sí se graven casas de valor superior a los $500.000″, planteó el candidato.