El ministro de Hacienda, Nogui Acosta, informó de que evalúan dar una ayuda económica a las familias pobres para que puedan afrontar el fuerte aumento en los precios de los alimentos, tal y como lo han propuesto varios especialistas.
“Ese es un camino que el presidente de la República (Rodrigo Chaves) planteó en su discurso de los 100 días y en este momento estamos evaluando las posibilidades, dentro del presupuesto actual, de poder implementar ese plan”, dijo Acosta.
En su discurso de los 100 días el mandatario planteó que la mejor protección contra la pobreza es el trabajo y detalló medidas en ese sentido, como que se destinarían ¢2.500 millones recuperados del bono Proteger, para mejorar la infraestructura educativa y obra pública, generando ingreso temporal a familias de Guanacaste, Limón y Puntarenas.
“Además, –dijo el presidente Chaves– con ¢20.000 millones, que nos permite usar la regla fiscal y los acuerdos con el Fondo Monetario Internacional, le podremos llevar asistencia a personas del país identificadas dentro del rango de pobreza, para que puedan llenar sus necesidades básicas de alimentación”.
En una información publicada por este diario el 18 de agosto varios especialistas planteaban la necesidad de apoyar a los hogares más pobres ante el fuerte incremento en los precios de los alimentos.
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En julio pasado, el índice de precios al consumidor para los alimentos subió 21% respecto al mismo mes del año anterior y el costo de la canasta básica alimentaria aumentó 22,7%.
El incremento en los costos de los alimentos golpea más fuerte a los hogares más pobres porque son los que dedican una mayor parte de su gasto total a la compra de comida (38% de su gasto es en alimentos).
El economista Ronulfo Jiménez, investigador de temas de pobreza, planteó que un subsidio directo es más barato que el subsidio a los combustibles, y va más directo al interés de proteger a las personas de menores ingresos.
“Técnicamente, es cierto que un subsidio directo es más barato, desde el punto de vista de que usted entrega un monto de dinero a una persona en condición de vulnerabilidad”, comentó Acosta.
Hace tres meses
Ennio Rodríguez, presidente del Colegio de Profesionales en Ciencias Económicas, añadió que esta agrupación, hace como tres meses, advirtió de que el país debería de alistar la ayuda porque puede llevar tiempo canalizarla hacia quienes la necesitan.
“Eso toma tiempo, y es un poco el sentido de urgencia que el Colegio repite ahora, que ante esa eventualidad deberíamos ya estarlo pensando, es más, debiéramos estarlo implementando y por eso es que repito, deberíamos tener datos ciertos, si ya en julio se hizo el trabajo de campo (la Encuesta de Hogares) se podría hacer una estimación más rápida de cuál es la situación”, aseveró el presidente.
Se consultó al Instituto Nacional de Estadística y Censos (INEC), encargado de la Encuesta de Hogares, si es posible una estimación más rápida y Pilar Ramos, coordinadora de Divulgación Estadística de la institución, respondió que no es posible y los resultados serán divulgados el 19 de octubre.
“La operación estadística a cargo de este tema trabaja arduamente para tener los datos procesados y analizados lo más pronto que se pueda”, indicó Ramos.
El Colegio de Profesionales en Ciencias Económicas, estimó que la pobreza podría llegar en diciembre del 2022 a un 29,9% con la posibilidad de variar en un margen entre 26,9% y 32,9%, y el Instituto de Investigaciones en Ciencias Económicas (IICE) de la Universidad de Costa Rica que para diciembre la pobreza sería de 21,73%.
La diferencia obedece a que la estimación del colegio considera que los precios de los alimentos seguirán al alza, mientras que el IICE espera que bajen hacia final de año. En ingresos el colegio considera que se mantienen constantes y el IICE que mantienen al nivel de marzo pasado cuando ya se había registrado una mejora en el empleo y el ingreso.