Riesgo de paro cardíaco súbito después del sexo es muy bajo

Revisión de 4.557 casos de personas que sufrieron este evento reveló que solo 34 estuvieron relacionados con actividad sexual.

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El acto sexual no es un factor de riesgo alto para sufrir un paro cardíaco súbito y morir como consecuencia.

Científicos de la Universidad de Oregon, en Estados Unidos, hicieron una revisión de 4.557 casos de paros cardiorrespiratorios que se dieron entre el 2002 y el 2015 y vieron que solo 34 (el 0,7%) tenían como causa una relación sexual.

De ellos, 18 se dieron durante el coito y 15 exactamente después.

En uno de los casos no fue posible determinar en qué momento sucedió el evento cardíaco. Los pacientes estudiados tenían entre 34 y 83 años de edad.

"De los casos relacionados con sexo, 32 (el 94%) se dieron en hombres. Si lo vemos de otra forma, la actividad coital fue responsable solo del 1% de los eventos cardíacos en hombres y del 0,1% en las mujeres", manifestó en un comunicado de prensa Aapo Aro, coordinador de la investigación.

Además, el 29% de los pacientes cuyo evento sí tenía ligamen con el acto sexual, presentaba historia de alguna enfermedad cardiovascular y el 26% registraba síntomas de fallo cardíaco y tomaba tratamiento para ello.

De acuerdo con los investigadores, los hombres de raza negra fueron más propensos a este afección que los de otras razas.

Por otra parte, los afectados también estuvieron relacionados con consumo de alcohol u otras sustancias o se dieron después de una comida muy copiosa.

Si se observa el total de 4.557 casos analizados, menos del 20% sobrevivió después de llegar al hospital. Y, si se toman en cuenta, solo los 34 casos relacionados con el coito, únicamente seis lograron sobrevivir después de llegar al centro médico. (19,4%).

Según los investigadores, esto puede deberse a que solo un tercio de los pacientes recibieron resucitación cardiopulmonar (RCP) como medida mientras llegaba la ambulancia.

"Este hallazgo puede darnos pie a educar a la población en la importancia de saber RCP. Todos los paros cardiorrespitarios relacionados con el sexo ocurrieron en la presencia del compañero sexual de la víctima, pero en la mayoría de los casos ellos no pudieron ayudar por no conocer las técnicas de RCP", expresó en el comunicado Sumeet Chugh, uno de los investigadores.

¿Cómo se produce un paro?

Cuando se produce un paro cardíaco, el cerebro sufre de falta del suministro adecuado de oxígeno y, al mismo tiempo, de disminución del riego sanguíneo.

El cerebro solo puede permanecer cinco minutos sin la cantidad adecuada de oxígeno. Después de este tiempo, ya hay daños irreversibles. Si pasan 10 minutos, ya hay muerte neuronal.

La mayor parte del daño cerebral se da cuando la sangre vuelve a circular normalmente, ya que se producen cambios bioquímicos e inflamaciones que empeoran el panorama que dejó el paro cardíaco.

Si un paciente no es tratado a tiempo, las posibilidades de sobrevivir son casi nulas y, si sobrevive, el daño cerebral podría ser grave.

La actividad sexual anteriormente se ha asociado con otro tipo de afecciones cardíacas no fatales, como un infarto al miocardio. No obstante, esta es la primera vez que se explora un evento mortal, como lo es el paro.

Anteriormente, si embargo, sí se había estudiado el tema de muertes –en general, no solo por el corazón– durante el acto coital.

En el 2006, un estudio hecho en Alemania y publicado en la revista Forensic Sci Med Pathol, indicó que el 0,2% de las muertes naturales tenía como causa una actividad sexual.

Otros factores además del esfuerzo físico

¿Tener actividad sexual es un esfuerzo mayor para el corazón?

Según comentó la cardióloga Martha Gulati, quien no participó del estudio pero sí dio declaraciones a la prensa sobre el tema, el tener una relación coital sí genera un esfuerzo físico que la gran mayoría de las personas puede soportar sin problema, pero que, en el caso de quienes tienen un corazón debilitado, sí puede significar una diferencia.

"Muchas personas sobreestiman la cantidad de ejercicio que hacen durante el coito. Para la gran mayoría de los individuos es el equivalente a dos o cuatro METS", indicó Gulati.

Un MET es una unidad que habla de cuánto oxígeno se consume en una actividad determinada, y es utilizado para medir el esfuerzo físico realizado en diferentes funciones cotidianas.

"Por ejemplo caminar a una velocidad moderada puede consumir 2 METS. Hay personas que si la actividad sexual es muy vigorosa pueden llegar a 4 o 5 METS durante el orgasmo", señaló la especialista.

Para poner otro ejemplo, Gulati comentó que 5 METS es el promedio requerido en cualquier actividad física cotidiana (como barrer, lavar o limpiar la casa).

Este tipo de esfuerzo no tiene complicaciones para las personas, pero en quienes tienen un corazón debilitado por alguna enfermedad o condición genética y, además se combina con otros factores de riesgo, sí podría ser significativo.

En ese sentido, el reporte agregó: "A pesar de que la actividad sexual implica movimiento, los mecanismos que llevan a un paro cardíaco son muy específicos, y en algunas situaciones el alcohol, el uso de algunos medicamentos o estimulantes pueden jugar un rol clave en esta afección del corazón".