Coronavirus en África: ¿Por qué hay menos casos y muertes que en Asia, Europa y América?

Más de dos meses después de detectar el primer caso de coronavirus, África registra oficialmente muchos menos enfermos y fallecidos de covid-19 que Asia, Europa y América. El calor, la humedad y la población tienen que ver, de acuerdo con la ciencia.

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Naciones Unidas anticipa que África tendrá entre 300.000 y 3,3 millones de muertos por culpa del nuevo coronavirus. Sin embargo, por ahora, en este continente ningún país cuenta más 6.000 casos de enfermos ni más de 500 fallecidos, y el virus lleva más de dos meses de haber sido detectado.

En este Explicador analizamos las posibles razones por las que África cuenta oficialmente muchos menos casos de covid-19 que Asia, Europa o América.

Adelanto: podría haber una combinación de factores: el virus podría ser menos transmisivo en esta región del mundo, pero a la vez su circulación podría darse de forma escondida entre las poblaciones, sin ser registrado y/o divulgado por sistemas de salud y gobiernos.

Calor y población: ¿el virus se comporta distinto en África?

El nuevo coronavirus se registró por primera vez en el continente africano hace más de dos meses, el 14 de febrero, en Egipto. Para el pasado 28 de abril, las autoridades de El Cairo contaban oficialmente 5.042 personas enfermas y 359 fallecidos.

Egipto es el país con más casos registrados y el segundo país con más muertos por la nueva enfermedad. Por ahora, los datos de Egipto, sumados a los de las otras 53 naciones que conforman África, son mucho menos severos de lo que algunos expertos anticipan para el continente más empobrecido del mundo.

El pasado 17 de abril, la Organización de Naciones Unidas (ONU) reportó que según sus estimaciones, el continente africano podría sufrir entre 300.000 y 3,3 millones de muertes por covid-19, dependiendo de la intervención de medidas tomadas para detener los contagios.

Para calcular estas cifras, la ONU contó con estimaciones de científicos del Imperial College de Londres. En el peor de los escenarios, según esta casa de estudios superiores, África tendría más de 22 millones de infectados.

Estas previsiones lucen apocalípticas si se las compara con las cifras que registran oficialmente las naciones africanas. La ONU insiste que el continente se encuentra apenas en la fase 1 de la pandemia, pero hay un abanico de razones por las cuales el continente tiene tan pocos casos en comparación con el resto del planeta.

Exploremos primero las naturales: ¿el virus afecta menos a la población africana? ¿el calor impide que el virus se transmita más rápido?

Calor y humedad:

--Según la revista científica LiveScience, algunos estudios apuntan a que el nuevo coronavirus, llamado SARS-CoV-2, no se transmite tan eficientemente en las regiones más cálidas y húmedas del mundo como lo hace en regiones más frías.

--De acuerdo con una de las investigaciones citadas, realizada por los científicos Qasim Bukhari y Yusuf Jameel en el Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT), el 90% de las infecciones de covid-19 en el mundo, para mediados de marzo, ocurrieron en áreas donde las temperaturas oscilan entre los 3 y 17 grados centígrados, con niveles de humedad entre los 4 y los 9 gramos por metro cúbico (g/m3; se refiere a cuánta humedad hay en el aire, independientemente de la temperatura).

--En los países con temperaturas promedio superiores a los 18 grados centígrados, los casos de enfermos de covid-19 solo representaban al 6% global para mediados de marzo.

--Los científicos precisan también que el 83% de los test de covid-19, en la fecha mencionada, se habían realizado en países no tropicales. Un dato a tener en cuenta.

--El estudio de MIT fue publicado el pasado 19 de marzo y fue revisado por última vez el 18 de abril. Podés descargarlo y leerlo aquí.

En sus conclusiones, el estudio indica:

“Pese a que la data disponible está sesgada por pruebas mínimas per cápita en muchos países tropicales, es posible que el clima juegue un rol en la transmisión del covid-19, cuando las temperaturas son elevadas. Si el covid-19 es sensible a estos factores climatológicos, sin embargo, esto no quiere decir que no se transmitirá en regiones calientes y húmedas. Intervenciones efectivas de sistemas de Salud Pública deben ser implementadas en todo el mundo para enlentecer la transmisión”.

Para Eugenia Corrales-Aguilar, microbióloga del Centro de Investigación de Enfermedades Tropicales (CIET) de la UCR, doctora en Virología y catedrática universitaria, el impacto del clima en la transmisión del covid-19 tiene que ver con tres aspectos. Entre ellos, que las poblaciones en países fríos se comportan diferentes que en el lugares calientes.

1-- “En climas fríos, al estar frío y al haber nieve, la gente es más dada a quedarse en casa o a agruparse en lugares cerrados. No van tanto al parque, no van tanto a caminar, sino que buscan el restaurante, los centros comerciales. Es como en Costa Rica cuando llueve. La gente se amolota bajo techos, en paradas de bus, la gente camina menos, van más en el bus, el bus va cerrado”.

“Entonces no es un asunto de si hace calor o frío, sino de que la distancia que debe haber entre la persona contagiante y la persona contagiada, se ve disminuida. No está el distanciamiento físico que se está promoviendo”, explica Corrales-Aguilar.

2-- Además, según indica la viróloga, quien ha trabajado con coronavirus de murciélagos en el pasado, nuestro sistema respiratorio tiene un movimiento ciliar que ayuda a expulsar posibles agentes infecciosos. En países fríos y con poca humedad, este movimiento se realiza con menor frecuencia, y esto puede aumentar el contagio de enfermedades respiratorias.

Así lo explica la doctora:

“En las células que recubren mi vía respiratoria hay unos cilios, que son unos pelitos. Esos pelitos tienen un movimiento constante. El movimiento generalmente va hacia afuera del sistema respiratorio, hacia mi nariz o hacia mi boca. Esto es para expulsar cualquier partícula de polvo, moco, lo que sea. Expulsarlo para que no entre al sistema respiratorio profundo (los pulmones)”.

“Entonces, en países donde hay baja temperatura y baja humedad, ese movimiento, que es constante, se ve disminuido. Al tener este movimiento disminuido, aumenta la probabilidad de que si llegó allí una partícula viral, esta partícula tenga más chance de infectar y más chance de ir al sistema respiratorio profundo”.

Sobre este tema, Corrales-Aguilar cita un estudio realizado por la inmunóloga japonesa Akiko Iwasaki, de la Universidad de Yale.

3-- Y el tercer punto que precisa la experta es que en países con climas calientes y niveles de humedad elevados, cuando las personas tosen o estornudan, las gotitas de saliva que llevan el virus y otros gérmenes absorben la humedad del aire, se vuelven más pesadas, y caen más rápido al suelo por la gravedad.

Con menos humedad, el SARS-CoV-2 puede permanecer más tiempo en el aire o viajar más lejos a través de las gotitas de saliva. Con mayor humenada, las gotitas caen más rápido al suelo.

Población:

Se ha especulado acerca de la posibilidad de que las poblaciones de África tengan más resistencia contra el covid-19 que otras poblaciones. A estas alturas, es un tema que requiere muchas más investigaciones, pero sí hay un factor importante en la demografía del continente.

La viróloga Eugenia Corrales-Aguilar explica que las patologías se pueden agravar dependiendo de las respuestas de los sistemas inmunes. Y esta respuesta está ligada a componentes genéticos.

“No es lo mismo cómo yo voy a responder al virus y cómo usted va a responder al virus”, valora la especialista. “Entonces, tal vez hay algún tipo de diferencia genética de población, que lo haga comportarse diferente. Pero esa es una hipótesis que necesita muchos más estudios, para ver cuál componente del sistema inmune es el responsable”.

“Para otras enfermedades, como la malaria, la enfermedad del sueño y algunos parásitos, sí se ha visto ciertos factores protectores en la etnia negra, en la raza negra. La hipótesis no es descabellada, pero yo no tengo evidencia científica ni fundamento científico para decirlo”.

En Estados Unidos, de hecho, aunque se trata de una cultura y un sistema de Salud muy diferente, las poblaciones afrodescendientes sí se ven muy afectadas por el covid-19 en las grandes ciudades, y son susceptibles a recibir menos atención médica.

El factor poblacional que sí puede influir en cuanto a la falta de gravedad de casos del covid-19 en África es la distribución etaria, comenta Corrales-Aguilar. Es decir, la distribución por edades.

“En Europa, Asia, y en Costa Rica hay mucha población mayor de 60 años. En varios países de África esta distribución es menor. Sabemos que se pueden infectar todos, pero quienes se complican más son los de mayor edad. Esa es otra hipótesis, pero también se requieren estudios”, precisa la doctora.

En la siguiente tabla, con datos de Statista.com, podemos ver la diferencia abismal entre África y los demás continentes en cuanto a poblaciones y edades. En ese continente hay muchos más jóvenes que mayores de 65 años.

Gobiernos, sistemas de salud y pruebas covid-19

El pasado 22 de febrero, tras una reunión de ministros de Salud de África en Adís Abeba, capital de Etiopía, los países acordaron tomar medidas fuertes para contrarrestar la expansión de la enfermedad, aunque para esa fecha el continente solo contaba el caso de Egipto, registrado el día de San Valentín.

En dicha reunión se admitió que el continente no tiene los recursos suficientes para enfrentarse a la pandemia, y se decidió, por lo tanto, la toma de medidas “enérgicas”.

En marzo, la gran mayoría de países africanos ya controlaban férreamente sus puertos marítimos y sus aeropuertos, al tiempo que cerraban sus fronteras, prohibían actos públicos e imponían cuarentenas militarmente.

Además de la toma de medidas y de la explicación científica anterior, hay una cuestión política a tener en cuenta: hasta cierto punto, no se puede confiar plenamente en los datos sobre el avance de la enfermedad divulgados por algunos gobiernos africanos.

De acuerdo con el Índice Democrático de The Economist, que genera un puntaje por país con datos de procesos electorales y pluralismo político, funcionamiento del gobierno, participación política de los ciudadanos, cultura política y libertades públicas; 47 países africanos son considerados como regímenes autoritarios (dictatoriales o semi dictatoriales), o como regímenes “híbridos”, con algunas características de democracia y con algunas características de dictadura.

24 de los 54 países de África aparecen entre los últimos del ránking con gobiernos considerados como autoritarios, y solamente 7 gobiernos son considerados como “democracias imperfectas” (en orden de aparición, estos son los países más democráticos del continente, según el índice: Cabo Verde, Sudáfrica, Timor Oriental, Lesoto, Ghana, Túnez y Namibia).

Esto merma fuertemente la transparencia de las informaciones públicas en todos los niveles, y, desde luego, en el avance del covid-19 (véase casos de gobiernos autoritarios y comunicación del covid-19 como el de Nicaragua o el de Corea del Norte).

Sumado a esta falta de transparencia, los sistemas de Salud Pública son, en su mayoría, deficientes, al tratarse de países empobrecidos en su mayoría (subdesarrollados, en vías de desarrollo).

Según el Índice de Desarrollo Humano (IDH) de Naciones Unidas, el país africano más desarrollado es Argelia, en el puesto 82. Solo otras cinco naciones africanas aparecen entre los primeros 116 países del mundo, considerados con desarrollo humano muy alto o alto.

48 de 54 países de África aparecen en los registros de Estados con desarrollo humano mediano o desarrollo humano bajo. En esta última categoría, de los 35 países del mundo que figuran en ella, 31 son de África.

Lo que indica esto es la poca capacidad de la respuesta sanitaria que el continente es capaz de darle a la población ante el covid-19. Esto se traduce automáticamente en menos pruebas por millón de habitantes disponibles y un registro oficial deficiente de la pandemia en la mayoría de países.

Datos de la ONU sobre el subdesarrollo en África:

--56% de las poblaciones africanas están concentradas en zonas urbanas de hacinamiento y poca atención médica.

--Únicamente un 34% de hogares tienen acceso básico a agua potable.

--71% de la fuerza laboral del continente corresponde al empleo informal, y la mayoría no puede hacer teletrabajo.

--40% de los niños menores de 5 años están malnutridos.

--De todos los continentes, África tiene más presencia de factores de riesgo ante el covid-19 como tuberculosis y VIH/Sida.

--El continente es particularmente vulnerable a la pandemia por el bajo número de camas de hospital, profesionales de la salud, alta dependencia de equipos y productos médicos y farmacéuticos, sistemas de identificación de la población débiles, economías empobrecidas incapaces de soportar los costos de las cuarentenas.

Lo anterior explica que, para una gran mayoría de países africanos, resulta difícil proveer datos confiables sobre el avance del covid-19. Y en caso de que la enfermedad circule de forma inadvertida, el alto impacto que puede llegar a causar en cuanto a muertes puede ser muy alto.

Un continente menos conectado

Tomando en cuenta todo lo estudiado hasta ahora, queda un dato más que puede ayudar a comprender por qué el continente africano registra menos casos de covid-19 que Asia, Europa y América: el flujo de viajes entre continentes es mucho menor aquí que en las demás regiones del mundo. O sea que África puede estar menos expuesta al virus, cuyos epicentros, en orden cronológico, fueron China, Italia y Estados Unidos.

De acuerdo con el anuario 2018 de la Organización de Aviación Civil Internacional de la ONU, así se dividió el tráfico aéreo mundial ese año por continente:

--Asia y Pacífico: 34.8%

--Europa: 26.3%

--América del Norte: 22.4%

--Latinoamérica y Caribe: 5.1%

--Medio Oriente: 9.2%

--África: 2.1%

En cuanto al transporte comercial marítimo del mundo, así se repartió entre continentes en 2019, de acuerdo con la ONU:

--Asia: 64%

--Europa: 16%

--América del Norte: 8%

--Latinoamérica y el Caribe: 7%

--África: 4%

--Oceanía: 2%

Todo es nuevo con el covid-19. Por ahora, el avance del mal sanitario parece lento entre los países de África. Con los datos disponibles y analizando distintos factores, podemos concluir que estas dos cosas podrían están pasando:

1-- El covid-19 está circulando y se está transmitiendo, pero hay subregistros generales en todo el continente en cuanto a número de casos y muertes. Esto se debe a la pobre respuesta de Salud disponible y a gobiernos poco transparentes. Hay menos pruebas que en Asia, Europa y América, pero también hay autoridades que no acostumbran divulgar la información pública de forma clara y universal.

2-- El covid-19 podría no ser tan transmisible ni tan letal en África por las altas temperaturas, la mucha humedad y la demografía. Al haber menos población mayor de 65 años que en el resto del planeta, África tiene menos habitantes con el primer factor de riesgo ante el covid-19: la edad y el deterioro natural del sistema inmune.

A continuación, los países más afectados por el covid-19 por continentes. El contraste entre Asia, América, Europa y África es notorio (imágenes: worldmeters.info/coronavirus | datos: OMS, Universidad Johns Hopkins).

Covid-19 en África (28 de abril 2020)

Covid-19 en Asia (28 de abril 2020)

Covid-19 en Europa (28 de abril 2020)

Covid-19 en América del Norte, Centroamérica y el Caribe (28 de abril 2020)

Covid-19 en Suramérica (28 de abril 2020)