La Costa Rica futbolera tiene dos “mecas”: Italia 1990 y Brasil 2014. En ambas citas, delante de los ojos del Planeta Fútbol, la Sele hizo historia de la grande y despedazó quinielas acá, allá y acuyá.
En los dos torneos, el equipo tricolor llegó como la víctima propicia y se fue con la sonrisa ancha... y con un lugar indiscutible en el corazón y el recuerdo de quienes vibraron con sus triunfos (algunos dichosos, como el suscrito, vivieron las dos emociones).
Como escribió Eduardo Galeano, el fútbol es una religión sin ateos; sin embargo, las dos cosecharon conversos: personas que jamás se sentaron a ver un partido se engancharon con el asunto..., y algunos siguen hasta hoy (diría Ceratti).
Italia 1990 fue el primer “sí se pudo” de un fútbol que diez años atrás había sido calificado de “artesanal”.
La Tricolor de aquel entonces dejó el listón bien alto en las Copas del Mundo cuando superó la ronda de grupos, el primer equipo de la Concacaf en lograrlo en suelo europeo.
Sucedió en el Luigi Ferraris, de Génova, cuando Hernán Medford se pegó aquella carrera para anotarle el segundo gol a Suecia, que daría el pase a los octavos de final.
Veinticuatro años más tarde, el muro de los octavos corrió el mismo destino que el de Berlín: cayó.
En el grupo de la muerte más bravo de toda la historia, con tres campeones del mundo en él, la Sele del 2014 Costa Rica pasó en el primer lugar. Luego superaría a Grecia, en juego de “relojazo” para poner su propio listón.
Si en ese Mundial hubo un juego perfecto, fue ante Italia (victoria costarricense 1-0).
El diseño de Jorge Luis Pinto se cumplió al pide la letra y un pilar indiscutible de la estrategia de desarme de la Azzurra fue Giancarlo González, según narra el periodista y abogado Amado Hidalgo en el libro de crónicas Un sueño redondo .
Tras la Copa, Pipo recaló en el Palermo italiano y es titular indiscutible. Este domingo 25 visita con su club el estadio Luigi Ferraris, en un cruce de caminos de las dos hazañas mundialistas ticas.
Véalo. Serie A. Domingo 25. ESPN. 7:55 a. m.
El camino que lleva a febrero
No hay forma de extraviarse: el Super Bowl es “el espectáculo” de los Estados Unidos.
No hay nada, lo que se llama nada, que lo supere en pasión, interés, cobertura y trascendencia: lo que pasa en el Super Bowl se queda en la historia. Este será la edición XLIX.
Los Patriotas de Nueva Inglaterra y los actuales monarcas, Seahawks de Seattle disputarán el “superdomingo”.
Comandados por Tom Brady, los primeros llegan a su octava gran cita en los últimos 14 años. De este modo, empataron a igualando a Dallas y Pittsburgh, con el mayor número de comparecencias en este juego. Ganaron en 2001, 2003 y 2004
Los segundos, por su parte, tratarán de ser los primeros bicampeones de de la última década, desde que, precisamente, lo hiciesen los Patriotas.
De acá al 1.° habrá mucha tela que cortar. “Rumbo al Super Bowl” es una manera de llevarle el pulso al juego de juegos de los Estados Unidos.
Véalo. Diario. 5:00 P. M. ESPN