‘House of Cards’: Claire asume el poder que siempre soñó sin la sombra Frank Underwood

La última temporada ya está disponible en Netflix en medio de la polémica y la nostalgia. Logrará la serie estrella de esta plataforma ‘streaming’ mantener su éxito luego de la “muerte” de su protagonista y con una mujer al mando

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Claire. Así será presentada, sin el apellido de su fallecido esposo Frank Underwood, la nueva presidenta de los Estados Unidos en la sexta y última temporada de House of Cards, que llega este viernes 2 de noviembre a la plataforma Netflix. Esa será la decisión menos importante que tomará esta mujer en los ocho episodios que forman parte de esta entrega, ya que su llegada al poder estará marcada por las intrigas, traiciones y mucha incertidumbre.

Sin embargo, ella tiene muy claro su objetivo: demostrar que tiene todo lo necesario y más para dejar atrás el “legado” de su marido, quien misteriosamente falleció mientras dormía, y ser ella, por sí sola, quien cree un nuevo destino para su nación. Es así como desde el primer capítulo se verá a Claire, interpretada por la actriz Robin Wright, lidiando con temas relacionados con el papel de las tropas estadounidenses en la guerra o el cumplimiento de promesas hechas por Frank para conseguir el poder.

“Esta sexta temporada será para demostrar quién es el dueño de la Casa Blanca, quién es el dueño de la narrativa. Y eso sigue siendo así. Ella simplemente está luchando de una manera diferente, y no solo con el legado de Francis sino también con los personajes a los que él hizo promesas ”, declaró Melissa James Gibson, productora ejecutiva de la serie, a la agencia AP.

La presión de lidiar con todos estos temas será aún mayor cuando esta mujer se convierta en blanco de amenazas de muerte e insultos, simplemente por el hecho de ser la primera presidenta de los Estados Unidos. Esto la llevará a investigar quiénes son los verdaderos responsables de esta nueva “estrategia” que pretende desacreditarla, pues presume que se trata de alguien que está dentro de la Casa Blanca.

“Claire es una figura complicada. Eso era realmente importante para nosotros, que pudiera ser tan contradictoria y compleja y antiheroína como su difunto esposo” , agregó James Gibson.

En medio de este panorama, la mandataria también deberá lidiar con nuevos enemigos: los hermanos millonarios Annette y Bill Shepherd (interpretados por Diane Lane y Greg Kinner), y quienes no temerán en llegar hasta las últimas consecuencias para lograr que Claire cumpla con cada uno de sus deseos políticos, tal cual lo había prometido Frank. Es así como la posibilidad de tener su propia independencia política parece desvanecerse ante sus ojos.

Precisamente, la incorporación de Lane y Kinner al reparto de House of Cards es vista como una de las estrategias utilizadas por Netflix para darle un mayo peso al elenco de la serie, luego de la salida de Kevin Spacey tras ser acusado de acoso sexual en el 2017. Es por ello que estos personajes tendrán una importante carga en la trama, ya que lideran un conglomerado industrial líder cuyas fundaciones familiares ejercen una poderosa fuerza detrás del panorama político estadounidense, y ambos comparten una visión para el futuro de América, así como un pasado complicado con los Underwoods.

Mención aparte merece Doug Stamper, el incondicional y devoto asistente de Frank, y quien está en el otro extremo de la trama. Tras finalizar la quinta temporada, Stamper se declaró culpable de un asesinato cometido por su jefe, por lo que en esta nueva entrega está a la espera de conocer lo que le espera a nivel legal, todo en medio de un estado psicológico complicado.

"Esto obviamente es lo más grande con lo que tuvimos que lidiar. Al principio de la sexta temporada, uno ve por primera vez a un hombre increíblemente perdido”, aseguró el actor Michael Kelly, quien interpreta a Stamper, a la agencia AP.

Si algo ha destacado la crítica, que ha sido un poco escéptica con el recibimiento de esta última temporada, es que la influencia femenina en la serie es valiosa y hace un llamado de atención a las élites políticas de todo el mundo. Al menos, esa es la percepción de la actriz Patricia Clarkson, quien en esta sexta temporada interpreta el personaje de Jane Davis.

“Hay roles realmente importantes para las mujeres este año en House of Cards. Creo que este debería ser el reflejo de nuestra realidad actual", explicó Clarkson a la revista People. Con ella coincide Wright, quien dirigió el octavo capítulo de esta temporada, y que considera que la mujer está en toda la capacidad de asumir cargos trascendentales para el desarrollo de la humanidad.

La verdadera muerte de Frank Underwood

Cabe recordar que a finales del año pasado, Kevin Spacey, de 58 años, fue acusado de acosar y agredir a dos jóvenes actores menores, así como de tener una mala conducta en el set de filmación de la serie de Netflix. A esto se suma también la investigación que abrió Scotland Yard, en el Reino Unido, sobre dos agresiones sexuales y varios casos de acoso en el Old Vic Theatre de Londres, del que Spacey fue director artístico entre los años 2004 y 2015.

Esto hizo que el estadounidense decidiera pedir disculpas públicamente por los actos cometidos, al mismo tiempo que reconocía públicamente su homosexualidad. Sin embargo, esto no fue suficiente para la plataforma de servicios streaming, que decidió desligarse por completo de Spacey, sacándolo de la producción y cancelando una película sobre la vida de Gore Vidal, y que el actor protagonizaría.

Netflix no solo tuvo que pagar un alto precio de $40 millones por despedir al actor, sino que también tuvo que hacerlo a nivel de producción, pues ya se habían filmado los dos primeros episodios de la sexta temporada. Fue entonces cuando el equipo creativo apostó por continuar con la historia, pero esta vez el rol protagónico recaería en Robin Wright e intentarían controlar el efecto de los daños.

“Básicamente, la única respuesta que podíamos tener fue la que tuvimos. Que es que el elenco y el equipo y todos los involucrados decidieron inclinar la cabeza y responder contando la mejor historia que nos era posible. Era la única manera en que podíamos responder a cualquier cosa, cualquier circunstancia", afirmó a AP el productor Frank Pugliese.

Wright, quien tras el escándalo sexual en el que se vio involucrado su compañero de reparto expresó que nunca socializaron fuera del set de grabación, explicó a AP que luego de que se diera a conocer que la producción de la serie continuaría, se requirió de un enorme esfuerzo grupal para echar de nuevo a andar este proyecto.

“Todos realmente colaboramos y queríamos lo mejor para la serie. Así que pienso que fue una reunión de, ‘vamos, salgamos adelante y sigamos’” , declaró a la actriz a la agencia de noticias.

Hasta la fecha nadie puede negar que a Spacey le calzaba a la perfección el personaje de Frank Underwood, un hombre al que muchos consideraban como oscuro, despiadado, seductor y poderoso, y que se ganó la simpatía del público con actos desleales y nefastos. Puede que la naturalidad con la que el actor interpretaba a su personaje tuviera que ver con las similitudes entre ambos.

De acuerdo con Randall Fowler, hermano de Spacey, su padre, fallecido en 1992, era un partidario del nazismo, quien frecuentemente violaba y agredía a sus hijos. Spacey, sin embargo, dijo en entrevistas que su padre era “un hombre muy normal”.

House of Cards recibió un total de 210 nominaciones en los distintos premios televisivos, entre los que destacan el Emmy, Globo de Oro, Critics Choice y el Sindicato de Actores; logró ganar un total de 27 premios. Esto, aunado a la inversión inicial de $100 millones hecha por Netflix para la producción de la primera temporada, son algunos de los cimientos sobre los cuales la producción construyó un legado, que intenta mantener firme, aún después de la “muerte” su principal líder, tanto dentro como fuera de la ficción.