P ara la mayoría de mortales, el “sueño americano”, más que una posibilidad, es un eslogan publicitario.
Sí, millones de personas lo persiguen y muchas de ellas consideran a Estados Unidos la tierra de las oportunidades, pero pocos anhelos son tan ambiciosos como colocarse en el tope del hip-hop siendo una australiana de 16 años caminando sola en Miami. Todavía son menos las personas que lo han logrado.
Hace unos ocho años, Amethyst Amelia Kelly fue esa adolescente: impulsiva, alocada, libre. Le dijo a sus padres que se iría de vacaciones a Estados Unidos con una amiga, pero luego decidió alargar su estadía, y eventualmente les anunció que planeaba quedarse viviendo allí para perseguir su sueño de ser rapera, el cual venía amasando desde que escuchó la música de Tupac Shakur, cuando tenía 11 años.
No solo dejó a su familia atrás, sino que tampoco terminó el colegio. Audaz, se entregó al camino que trazó su corazón y no se dejó caer con nada, ni con las críticas, ni con la gente que decía que sus canciones de rap eran estúpidas, ni con las tensiones familiares que aquella decisión pudo generar, ni con las voces que sentenciaron que la industria musical era impenetrable para una desconocida como ella.
Hoy, a Kelly la conocemos mejor como Iggy Azalea –una denominación construída a partir del nombre de su perro de la infancia, Iggy, y de la calle Azalea, al frente de la cual todavía viven sus padres, en Australia–, aquella joven rapera que aparece en canciones de Jennifer López y Ariana Grande, y que ha batido récords con su disco debut y con canciones propias, como Fancy y Work , por ejemplo.
No obstante, antes de que el mundo del entretenimiento pusiera sus ojos sobre ella, Azalea tuvo que arriesgarse y trabajar duro –en ese orden–, para poder construir su camino a la cima del hip-hop ; mientras son muchos los que se cuestionan qué podrá lograr la artista en el futuro, es importante repasar quién es la rapera, de dónde viene y cómo hizo para alcanzar el lugar que ocupa en la actualidad.
Osadía. Azalea nació hace 24 años, en Sídney, Australia, pero su familia se trasladó rápidamente a Mullumbimby, Nueva Gales del Sur, un pequeño pueblo con una población de aproximadamente 3.000 habitantes. Su padre era pintor y su madre era empleada doméstica.
La casa en la que vivió la artista durante la mayor parte de su vida fue construida por su padre con ladrillos de cemento. “El lugar del que vengo es duro. La gente es resistente como las uñas. Yo no molestaría a nadie de ahí”, dijo Azalea.
“Ya sea que estés atrapado en una ciudad al interior del país o en el medio de la nada, es muy difícil salir de ambos, y eso crea a gente dura. Cuando hay falta de privilegios uno tiene que ser un luchador”, agregó.
La escuela y el colegio la hicieron sentirse miserable durante muchos años. Alega que realmente no tenía muchos amigos o lazos extrafamiliares en Australia, lo que le facilitó el tomar la decisión de irse.
Luego de conocer el hip-hop gracias a Tupac, empezó a enamorarse del género y de la música de artistas como Missy Elliott, Field Mob y Busta Rhymes.
A los 14 años empezó a rapear con otras dos jóvenes de su vecindario, pero luego se separó de ellas porque no se estaban tomando el asunto en serio.
Cuando se salió del colegio tenía claro que quería viajar al sistema nervioso del hip-hop , por lo que empezó a trabajar con su madre para acumular suficientes ahorros y así poder costearse el viaje que terminaría cambiando su vida.
“Para ser 100% honesta", respondió en una entrevista realizada en el 2012, “no tengo ningún amigo en Australia, solo mi familia. Me identifico con la cultura australiana, por supuesto –me crié ahí–, pero hay otras partes de otras culturas con las que me identifico más, que es la razón por la que me mudé”.
“Me sentí atraída a Estados Unidos porque me sentía como una extranjera en mi propio país, amaba el hip-hop y ese es el lugar de nacimiento de eso, así que pensé que si podía estar más cercana a la música, más feliz sería. Tenía razón”, manifestó en otra entrevista.
Mezcla. Solo conocía a una persona cuando arribó a Miami, en el 2006. Cuando decidió quedarse, se fue a Texas y a Georgia, lugares en los que empezó a forjar conexiones con personalidades del hip-hop .
La influencia que ejercieron en su expresión esas experiencias, lugares y personas es notable hoy en día: su acento no parece australiano, sino sureño. “Uno toma cosas de sus alrededores y sus maestros: la gente que me enseñó sobre rap es del sur y también lo era la música que escuchaba de joven”, aseguró.
En el 2010, se fue a vivir a Los Ángeles. Empezó relaciones con Interscope Records y un año después su canal de YouTube tenía miles de visitas por sus videos de freestyle y de la pieza Pu$$y , su primer éxito.
Ignorant Art , su primera mixtape , llegó en setiembre del 2011 y la puso en el mapa gracias a ese tema y My World . Azalea dijo que lanzaría The New Classic , su disco debut de larga duración, en cuanto firmara contrato con una disquera.
No obstante, eso se atrasó durante casi tres años, tiempo en el que la australiana tuvo problemas y cambios con distintas discográficas, razón por la que en julio del 2012 publicó el EP o disco corto Glory .
Meses antes se convirtió en la primera rapera que apareció en la portada de la Freshman List, un listado de la revista de hip-hop XXL que destaca las próximas grandes estrellas de ese género musical.
Mientras el disco se atrasaba cada vez más, Azalea colaboraba con artistas como Steve Aoki y Diplo, y se iba de gira con Rita Ora y Beyoncé, mientras se codeaba con gigantes del hip-hop , como el buen Nas.
Finalmente, la músico firmó un contrato con Island, mientras estaba de gira con Beyoncé en Australia, a mediados del 2013, pero la disquera decidió atrasar el lanzamiento hasta finales de abril del 2014.
Antes del lanzamiento del disco, entre marzo del 2013 y febrero del 2014, Azalea publicó los sencillos Work , Bounce , Change Your Life y Fancy , los cuales gozaron de amplia atención y popularidad en el mundo; a la vez, aseguraron el éxito de The New Classic .
El álbum debutó en los primeros lugares de varios listados internacionales, pero el hito ya lo había logrado en mayo, cuando Fancy se colocó en el primer lugar de la Billboard Hot 100 , convirtiéndose en la cuarta rapera en la historia en lograr ese puesto en la lista.
El segundo lugar lo ocupó la canción Problem , de Ariana Grande, en la cual Azalea colaboró. Ese logro –tener dos canciones en el tope de la lista– solo lo habían conseguido los Beatles y Ashanti.
Black Widow , un quinto sencillo del disco, junto a Rita Ora, empezó a promocionarse a finales de junio y también gozó de amplia rotación en radio y en Internet.
Ocho años le tomó ganarse el respeto del gremio del hip-hop estadounidense y el aplauso del público. Más importante que eso, su testimonio aprueba la idea del “sueño americano”, pues no hay forma de negar que no logró cumplirlo.
En una entrevista al respecto, Azalea dijo: “Todo es posible: ¡Yo no me gradué del colegio y quería conseguir un contrato con una gran disquera en Estados Unidos como una rapera! Parece imposible, pero lo logré; me tomó años y nunca me desapegué de la esperanza. Todo lo que puedo aconsejar es no rendirse, trabajar duro e inteligentemente para conseguir lo que quieren”.