Testamento de príncipe Felipe será sellado 90 años para proteger ‘dignidad’ de Isabel II

Juez de Familia de Londres prohibió que la última voluntad del duque de Edimburgo, fallecido en abril a los 99 años, se haga pública

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Una corte de Londres dictaminó que el testamento del príncipe Felipe se sellará y tendrá carácter privado por los próximos 90 años, con el objetivo de preservar la dignidad de la reina Isabel II.

Esta medida no es extraña dentro de la monarquía británica y se remonta a 1910, cuando ante la muerte de un miembro mayor de la realeza sus familiares pueden solicitar el sello del documento que registra su última voluntad.

El duque de Edimburgo falleció en abril anterior, a los 99 años, luego de más de siete décadas de matrimonio con la monarca inglesa.

La decisión fue tomada por el juez Andrew McFarlane, presidente de la División de Familia de la Corte, quien indicó que no se debe hacer ninguna copia del testamento para el registro ni mantenerse en el expediente judicial.

Esta medida busca que, a diferencia de la mayoría de los testamentos ordinarios, el del excompañero de la reina no estará abierto a la inspección pública.

“El grado de publicidad que probablemente atraiga la publicación sería muy extenso y totalmente contrario al objetivo de mantener la dignidad de la soberana”, dijo McFarlane durante el fallo, dado a conocer el jueves.

No obstante, el letrado consideró que es de interés público revelar la solicitud hecha para sellar el testamento del príncipe Felipe, así como informar de su aprobación.

McFarlane calificó el período de 90 años como “proporcionado y suficiente”. Luego de ese periodo el documento se podría abrir para una posible publicación.

Asimismo, el juez dijo que no había tenido acceso al testamento del príncipe Felipe ni había escuchado nada sobre su contenido, solamente la fecha de su ejecución y la identidad del albacea designado.

De igual forma, McFarlane confirmó que durante la audiencia realizada en privado para tomar la decisión no hubo representación de los medios, ya que afirmó que el interés público fue defendido por el Fiscal General.

Gran fortuna

Tras la muerte de Felipe, el diario británico The Sun publicó que la fortuna del duque no sería en exclusiva para la reina, ya que habría otras personas que heredarían parte de sus bienes.

De acuerdo con la publicación, entre los beneficiados estarían tres de sus ayudantes: su secretario privado, el brigadier Archie Miller-Bakewell, y los pajes William Henderson y Stephen Niedojadlo; quienes estuvieron al lado de Felipe desde hace muchos años, incluso participaron del cortejo fúnebre del príncipe.

También la herencia, calculada en unos $43 millones, se repartiría entre sus nietos, entre los que se encuentran los príncipes Guillermo y Enrique.

La reina Isabel también recibirá buena parte de ese dinero y será la dueña de la mayoría de los activos de los cuales eran copropietaros.

Se desconocen mayores detalles sobre otros favorecidos con la última voluntad del príncipe Felipe y la decisión tomada por el juez garantizará total privacidad en ese sentido.

El primer miembro de la familia real británica, cuyo testamento fue sellado por la Corte, fue el del príncipe Francisco de Teck, quien murió en 1910 y era el hermano menor de la reina María, esposa de Jorge VI.

Francisco dejó varias esmeraldas valiosas a su amante, la condesa de Kilmorey, las cuales era muy preciadas por la reina María.