Lupita Nyong'o: otra actriz que acusa Harvey Weinstein

Según un revelador relato, publicado en The New York Times, el cuestionado productor la habría invitado a su casa y le habría ofrecido un masaje

Este artículo es exclusivo para suscriptores (3)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

Ingrese a su cuenta para continuar disfrutando de nuestro contenido


Este artículo es exclusivo para suscriptores (2)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

Este artículo es exclusivo para suscriptores (1)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

En un artículo publicado en The New York Times, Lupita Nyong'o dijo haber sido acosada por el productor estadounidense Harvey Weinstein, el mismo que a la fecha tiene una ola de acusaciones y denuncias por el mismo delito en sus espaldas.

El relato, escrito en primera persona, describe como Weistein la invitó a ver una película en su casa, para posteriormente decirle que quería hacerle un masaje.

---

La estrella de 12 años de esclavitud (2013) reveló además que conoció a Weinstein en Berlín, Alemania, cuando aún era una estudiante y "estaba ansiosa por conocer a gente de la industria".-

"Poco tiempo después de conocernos en Berlín, Harvey me escribió invitándome a asistir a la proyección de una película. Me dijo que la veríamos junto a su familia en su casa... Cuando llegó a la mansión, allí estaban sus pequeños hijos y los empleados domésticos. Después del almuerzo llegamos a su casa, conocí a su personal y a sus hijos. Me llevó a un breve recorrido por la casa antes de que nos reuniera a todos en la sala de proyección para ver la película", describió la intérprete.

Nyong'o procedió a ver la película, pero lo que sucedió después la perturbó. Esto fue lo que escribió en al respecto en el diario estadounidense:

"A los 15 minutos, Harvey vino a buscarme y me dijo que quería mostrarme algo. Protesté ya que quería terminar la película, pero insistió en que fuera con él, dictando la ley como si yo también fuera uno de sus hijos. No quería otro lío ante sus hijos, así que salí de la habitación con él. "Harvey me llevó a su dormitorio, y dijo que quería darme un masaje. Pensé que estaba bromeando al principio. Me sentí insegura. Entré en pánico un poco y pensé rápidamente en ofrecerme yo a hacerle los masajes y así tomar el control para ganar tiempo y saber en todo momento dónde estaban sus manos".

LEA MÁS: Harvey Weinstein: un presunto depredador, expuesto

"Estuvo de acuerdo con esto y se acostó en la cama. Empecé a masajearle la espalda para ganar tiempo, para descubrir cómo librarme de esta situación indeseable. En poco tiempo dijo que quería quitarse los pantalones. Le dije que no hiciera eso y le informé de que me haría sentir extremadamente incómoda. Se levantó de todos modos para hacerlo y me dirigí a la puerta, diciendo que no estaba del todo cómoda con eso. 'Si no vamos a ver la película, debo regresar a la escuela".

Nyong'o agregó en el artículo que tuvo varios encuentros más. Uno fue en un restaurante, tras la lectura de un guion, y el último fue en Nueva York, tras la presentación de la película W.E.

Luego de la cinta la actriz fue invitada a una cena, en la que fue informada solo estarían ella y Weinstein.

"Antes de que llegaran los aperitivos, anunció: 'Cortemos el rollo. Tengo una habitación privada arriba donde podemos tomar el resto de la cena'. Me quedé pasmada. Le dije que prefería comer en el restaurante. Me dijo que si quería ser una actriz, tenía que estar dispuesta a hacer este tipo de cosas. Dijo que había salido con la famosa actriz X e Y, y que viera dónde las había llevado", escribió Nyong'o en el artículo.

Nyong'o dijo no a la propuesta y Weinstein habría contestado así: "No tienes ni idea de lo que estás rechazando".

LEA MÁS: Harvey Weinstein: 'No estoy bien... Necesito ayuda'

Las últimas frases de la incómoda cena, según lo relata la actriz, fueron muy reveladoras.

"Antes de irme (de la cena), tenía que asegurarme de no haber despertado una bestia que arruinaría mi nombre y destruiría mis posibilidades en el negocio. –'Solo quiero saber que estamos bien', le dije'. 'No sé tu carrera, pero tú estarás bien', me dijo. Pareció una amenaza y un consuelo al mismo tiempo", finalizó.